Un grupo que creo su leyenda en los años 70, pero que es ahora cuando mayor proyección está teniendo. Sus primeras canciones han resistido muy bien el paso del tiempo, pero sus discos más recientes demuestran que no viven, para nada, de su pasado.
Tabletom son un grupo de culto, que permaneció en el olvido prácticamente total, salvo en su querida Málaga, hasta que a mediados de los 90 el grupo Extremoduro tomó una de sus canciones, “Me estoy quitando”, y realizó una versión para su disco “Agila”.
Ésta ha sido la canción que más derechos de autor les ha dado y también la que les dio la oportunidad de ser redescubiertos y reivindicados a partir de ese momento.
En el año 1976 se formó el grupo entorno a Roberto González, cantante, y José Ramírez, saxo y flauta, y Pedro Ramírez, guitarra. Junto a ellos desde entonces han tocado otros muchos músicos pero son ellos tres el alma de Tabletom y los que se han mantenido siempre constantes en la formación.
Su primer disco, “Mezclaina” (1979), era una propuesta iconoclasta, en la que se fundía el rock de la época con la herencia andalusí, plena de influencias árabes, de su tierra. Aquello no era un experimento de fusión, ni nada por el estilo… era tres jovencitos pasándolo bien y haciendo música sobre su universo, donde las ganas de ser libre, la inocencia de la juventud, y también las drogas, eran las protagonistas.
Aquel primer disco se editó con RCA, una de las compañías más importantes del momento, pero sus directivos no supieron aprovechar el potencial del grupo, sobre todo por que no cuadraba con las etiquetas de la época y porque a pesar de tener algunos elementos comunes, ellos no tenían nada que ver con el concepto de “rock andaluz”, corriente de moda en aquellos años que tuvo su mayor éxito en los magníficos discos de Triana (dejando de paso otras formaciones realmente buenas… Imán, Guadalquivir e incluso los primeros Medina Azahara).
Esa incomprensión inicial se convirtió en una constante en la trayectoria del grupo y a pesar de la valía de su propuesta, la originalidad de su planteamiento y el resultado positivo de sus discos, nunca lograron llegar más allá de un público minoritario y solamente desde hace muy poco años, tras la versión ya antes citada que realizaron Extremoduro, lograron cierto nivel de éxito.
Durante los años 80 publicaron solamente un single, “Recuerdos del Futuro” (1983), y un trabajo en cinta de cassette “Rayya”.
En los 90 comenzaron a grabar para el sello Nuevos Medios y allí editaron dos LPs: “Inoxidable” (1992) y “La Parte Chunga” (1998). En esos años también editaron un disco en directo, “Vivitos y Coleando” (1996), con Antequera Records.
Ya en la década actual, con Nuevos Medios, publicaron primero el álbum “7000 Kilos” (2002) y después la recopilación “Lo más peor de Tabletóm”, construido con tres temas de legendario Mezclaina y con canciones de los tres discos en estudio editados con Nuevos Medios.
En los últimos años Tabletom ha estado (y sigue estando) en activo, dando conciertos con regularidad, con planes de grabar un próximo álbum y conquistando cada vez a más público que pertenece a varias generaciones… desde los que disfrutaron del grupo en sus primeros años a las varias oleadas de oyentes que les descubrieron a partir de mediados de los noventa.
De forma paralela a Tabletom, los hermanos Ramírez han desarrollado una basta carrera musical, que incluye varias formaciones, incursiones en el jazz y la música clásica, así como trabajos en estudio o en directo para multitud de otros artistas (incluidos nombres legendarios… Camarón de la Isla, Paco de Lucía, Pata Negra, o Kiko Veneno), además de ejercer como profesores en el conservatorio de Málaga.
• Vuestros inicios son legendarios… Pero… ¿Para vosotros el mejor momento de Tabletom fueron aquellos años, o es ahora que tanta gente os respeta y admira?
Cada época tiene su encanto, por nuestra forma de ser vivimos el día, disfrutamos el momento, sin preocuparnos del futuro. Lo hemos pasado muy bien en el pasado con nuestra música y es lo que esperamos del futuro
• Y en aquellos inicios… ¿Teníais claro que la música era vuestra profesión o simplemente os divertíais sin pensar en el futuro?
Simplemente nos divertimos pero sentíamos que era lo que queríamos hacer el resto de nuestras vidas.
• Fuisteis pioneros en la fusión de estilos… ¿Qué grupos escuchabais en aquellos años? ¿Os fue difícil fundir esas músicas para hacerlas vuestras?
Oíamos: Gong, Magma, Soft Machina, Chick Corea, Herbie Hancock, Miles Davis, Oregon, etc. (en los primeros tiempos). No nos resultó difícil la fusión de música por que nos salía de forma natural al escuchar distintos tipos de música y no pertenecer a un estilo concreto. Al gustarnos estilos tan diferentes. Lo que buscábamos era la calidad.
• Vuestro primer disco, “Mezclalina”, lo grabasteis para RCA y parece ser que de repente tuvisteis acceso a un estudio buenísimo y a un hotel de lujo… ¿cómo fue aquello?
Por mediación de Ricardo Pachón al principio nos impresionó el montaje de lujo pero al poco tiempo nos dimos cuenta de que todo era pastel. A cualquiera con 18 años aquello le hubiera deslumbrado y se hubiera creído una estrella a nosotros nos hizo el efecto contrario ya que ese no era nuestro lugar.
• ¿Por qué RCA no apostó de forma decidida por el disco?
No sabemos las razones, pero sospechamos que no sabían que hacer con nosotros y creemos que no entendieron nuestra música como la mayoría de las compañías excepto Nuevos Medios.
• De ese álbum se publicaron muy pocas copias y ahora, por fin, se vuelve a poder conseguir, pero vendido desde vuestra web y en formato CD-R. ¿No se interesó la discográfica en reeditarlo ahora y en un formato normal?
No creemos que se acuerden de nosotros ni de este disco que grabaron y esperamos que siga así. Ahora lo editamos por nuestra cuenta y riesgo.
• Parece ser que a mediados de los 70 vivisteis juntos en una especie de comuna… Donde os iba a ver mucha gente, entre ellos artistas de bastante éxito en aquel momento o más tarde… ¿Cómo fue aquella etapa de vuestra vida?
En ese momento no teníamos dinero para alquileres de casas y encontramos una en el campo barata y nos fuimos todos allí, estaba bien por que lo que queríamos era tocar todo el tiempo y allí se podía. La casa se hizo tan famosa que vino la policía secreta de estupefacientes de la costa del sol buscando un laboratorio de L.S.D y resultó que se quedaron toda la noche con nosotros y se fueron muy contentos aunque no se comieron nada.
• Por cierto… en una entrevista he leído que iba Camarón y que pasaba de “sufragar sus gastos”. Mucha gente lo considera un genio, pero… ¿Cómo era como persona?
Si iba algunas veces por allí, nos gustaba mucho como artista (un monstruo) mi hermano Jose (flauta) tocó mucho con él, lo cual le llena de orgullo. Como persona, tenéis rezón le costaba soltar el dinero por que estaba acostumbrado a que se lo regalaran todo. Pero nosotros no estábamos en condiciones de regalar aunque nunca tuvimos el mas mínimo problema, todo lo contrario.
• Basta con fijarse en vuestras letras, saber algo de vuestra biografía o leer alguna entrevista vuestra, para darse cuenta de vuestra “estrecha” relación con las drogas… ¿Cuál es el secreto para que no hayáis tenido problemas graves de salud como muchos otros? ¿Hay mucha hipocresía al hablar de drogar y en las campañas para disuadir su consumo?
Sí, las letras reflejan nuestra vida, ni tenemos secreto, sólo que las drogas nunca han sido nuestro motor ya que nuestro motor siempre ha sido la música que es lo único que abusamos. Sí, hay mucha hipocresía, poca y mala información y una ignorancia muy atrevida a la hora de opinar, como pasa en todos los aspectos de la vida.
• A principios de los 80 participasteis en la denominada “Gira Histórica”, donde estaba gente muy variada… desde Pata Negra a Camarón… e incluso ¡María Jiménez!. ¿Cómo fue aquello? ¿Había buena relación entre los grupos y artistas a pesar de vuestra disparidad?
Había buena relación, aunque musicalmente éramos muy diferentes la química funcionaba, sobretodo entre María Jiménez, Camarón, Pata Negra, Silvio, y Tabletom. De hecho en Granada empezó a llover, había problemas con la electricidad y acompañamos a María Jiménez Raimundo y Rafael a las guitarras y yo con la flauta.
• Luego los 80 fueron una especie de travesía del desierto para vosotros… ¿qué sucedió para que se os hicieran tan cuesta arriba?
En todas las épocas hemos estado fuera de lo que se llevaba. Al principio nos intentaban vender como rock andaluz (error) después con la movida madrileña y su glamour, parecíamos antiguos (por que claro, al lado de Alaska y los Pegamoides) más tarde viene ¡¡el flamenquito!!. Y seguimos fuera del tiesto (gracias a los dioses).
• Durante esos años dabais “por muerto” a Tabletom o siempre pensasteis que estaba dormido… ¡y volvería!…
Eso lo pensaron los demás, nosotros siempre hemos hecho música y estamos muy despiertos por la cuenta que nos trae.
• Durante los 90 tuvisteis una evolución intermitente con varios discos editados, pero con intermedios de años entre ellos… ¿Cómo fue esa década?
Esa fue la época con más apoyo de la compañía, ya que sacamos 3 CDS (todo un record).
• Y avanzada la década vino la sorpresa de la versión que os hicieron Extremoduro y que supuso un buen empujón para vosotros… ¿Cómo os enterasteis de que un grupo había hecho una versión vuestra? ¿Fue una sorpresa para vosotros?
Cuando nos llegó el cheque de Autores, S.G.A.E, ya nos dimos cuenta de que algo raro estaba pasando.
• Por cierto… en toda vuestra carrera se repite el nombre de Mario Pacheco, director de Nuevos Medios, como una ayuda importante para vosotros en momentos importantes… ¿Qué ha aportado su trabajo a Tabletom?
Es una de las pocas personas, junto con Ricardo Pachón, que a entendido nuestra música y el único con valor para grabarnos.
• Parece ser que actualmente es cuando más gente va a vuestros conciertos… además gente de varias generaciones… ¿Os imaginasteis alguna vez que el mayor reconocimiento lo lograríais después de tantos años?
El hecho de estar ahí durante 30 años hace que se vayan arrimando gente de distintas edades, el valor está en resistir, y eso demuestra que sabes lo que te gusta y te gusta lo que sabes y eso con el tiempo se valora.
• El último disco vuestro que se ha publicado es “Lo Más Peor de Tabletom”, un recopilatorio que salió hace ya dos años… ¿Para cuando un nuevo trabajo?
Estamos en ello para finales de verano 2006 o para Navidad.
• Vosotros sois un ejemplo de los buenos grupos musicales que ha dado nuestro país… sin embargo el éxito “a gran escala” sigue reservado para las “estrellitas de quita y pon”. Vosotros que conocéis, por haberlo vivido, la evolución de la música española desde los años 70… ¿Porqué la industria nunca, o casi nunca, ha apostado por la música de verdad?
Son preguntas difíciles de contestar ojalá lo supiéramos.
• Dos de vosotros trabajáis como profesores en el conservatorio de música… ¿Se sorprenden vuestros alumnos, o sus padres, cuando se enteran de vuestra carrera con Tabletom?
Sí, pero favorablemente
• De vosotros, José ha participado en discos de Paco de Lucía y Jorge Pardo, dos artistas que en La Factoría del Ritmo nos gustan muchos… ¿Qué nos pueden contar de tus experiencias junto a ellos?
Lo de Paco era frustrante varias veces estuve en su casa pero nunca logré conocerlo o estaba en México o nunca coincidíamos (¡que pena!). A Jorge si lo conozco hemos coincidido varias veces y tenemos buena relación, de respeto y admiración
• Sabemos que además de Tabletom habéis tenido otras experiencias y que os gusta tocar jazz… ¿Qué nos podéis contar de esas otras experiencias y sobre vuestra afición al jazz?
Nuestra afición al Jazz está dentro de la evolución normal de músicos como nosotros que empezamos tocando rock, blues, y poco a poco estudiando te vas metiendo en el jazz que tiene un nivel musical que nos interesa por que es la forma de avanzar y aprender en la música, lo mismo podríamos decir de la música clásica a la que dedicamos buena parte de nuestro tiempo, de hecho es la que nos da de comer. Tenemos un grupo de jazz fusión Ramírez Brothers Bands y un dúo de música clásica guitarra y flauta. Mi hermano Jose pertenece a la orquesta sinfónica de Málaga con la que yo también he colaborado.
• Vuestras letras están estás escrita por Roberto y por el poeta Juan Miguel González… ¿Qué nos podéis contar de Juan Miguel?
Siempre hemos utilizado letras de poetas que nos gustan como Valle-inclán o Rubén Darío pero el nuestro es Juan Miguel González poeta malagueño al que admiramos. Es como nosotros un autor “maldito”. Tampoco se come una rosca pero es buenísimo.
• Y nada más… salvo desearos mucha suerte y dejaros espacio para si deseáis añadir algo más para nuestros lectores…
Agracederos vuestro interés por la entrevista.
Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 21 (sección: Entrevistas).
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