Concierto celebrado en la Sala Vivero de Málaga, donde se pudo disfrutar del grupo Perversión, con la presencia del cantante Tony Cuevas que debuta con el grupo esa noche, y de los temas clásicos de los legendarios Ñu.
Tras la entrevista que realizamos a José Carlos Molina en camerinos, durante los momentos previos en que se estaba probando sonido y acondicionando el equipo e instrumentos en el escenario de la coqueta sala malagueña Vivero. Por cierto, José Carlos se manifestó en todo momento estar encantado con la sala, todo eran elogios por parte del mítico flautista y líder vocal de Ñu hacia la misma. Nos despedimos de José Carlos y Gorka, su actual bajista por la amable atención prestada y nos vimos emplazados al concierto que tendría lugar unas horas más tarde. De dicha entrevista daremos cuenta avanzado el reportaje. Y vuelvo a incidir en todas las facilidades prestadas, tanto por parte de la sala como por el equipo humano de Ñu, en lo que más que una entrevista derivó en una grata charla con una gran figura del rock nacional y grandísima persona.
Por supuesto, saludamos y dimos el enhorabuena a los teloneros Perversion, que estrenaban line-up, nada más y nada menos que como gran novedad se presentaba esa misma noche, Tony Cuevas. El otrora vocalista de Bella Bestia en sus comienzos, Furia Animal, grupo fundado a raíz de la primera gran escisión de los de Vallecas y tal vez el grupo que le aportó mayor fama sobre todo a nivel internacional, Niágara. Todo un lujazo de cantante y buenísima persona, cuya presencia sin duda aumentaría la expectación entre el joven público asistente por ver actuar a la banda.
PERVERSION
Salieron a darlo todo y de estreno como hemos comentado, con un vocalista que es toda una leyenda en el rock nacional, Tony. Cuyo carisma, simpatía y buen hacer sobre el escenario, siendo muchas y bien avaladas tablas, llevó en volandas a la banda y no paró de exhortar al público, que entre maravillado, incrédulo y sorprendido estaba disfrutando por doble vía de clásicos de siempre que en su día hicieron grandes grupazos como Judas, Dio, Maiden o Metallica e interpretados en la noche por el gran cantante Sr. Cuevas, muy bien arropado, todo hay que decirlo por los hachas Becker, Púa y el bajista Darder. Con una excelente y espectacular puesta en escena a muy alto nivel, tanto o más con respecto a las glorias versioneadas. Ojalá algún día viéramos pronto un trabajo en la calle, sería un bombazo con tanto buen músico sobre el escenario, el resultado en un estudio de grabación si se hace con los medios apropiados podría ser de órdago.
ÑU
Amenizó con música metalera el D.J. Dr. Wen, bajista y vocalista de Bodega Caníbal, durante la velada, mientras cambiaban los equipos. Los temas elegidos fueron muy apropiados para el momento y el lugar, auténticos himnos del heavy patrio, tales como “Clasificado X” de Bella Bestia o “Maldito sea tu nombre” de Ángeles del Infierno, entre otras perlas del metal hispano. Entre tanto, se cortó esta magnífica banda sonora de la mayoría de los presentes, tuvo lugar la puesta en escena de Ñu, entre el clamor y la ovación del público, cuya asistencia rondó más de la media entrada del aforo, más o menos calculado en 650 personas. Con lo cual, os podréis imaginar el caluroso encuentro entre músicos y los fans. Sobre todo, teniendo en cuenta que hacia bastantes años que la banda madrileña no se hacia caer por la provincia. La última vez, sobre comienzos del 1995 en la gira de presentación del gran disco “La danza de las mil tierras”, con miembros tan emblemáticos por entonces, como José Barta a los teclados o Stevoslav Koichev al violín. La sala de entonces donde descargó la banda fue la Discoteca Yo de Rincón de la Victoria. Anteriormente, habían hecho lo propio, un año antes, en lo que fue su primera gira andaluza, que los llevó a recorrer provincias como Cádiz o Sevilla, para acabar en La Cueva de Torremolinos. En donde José Carlos se hizo acompañar de unos inmensos músicos, del talento y experiencia de Luis García a la batería, el exótico y virtuoso Carlos Kakutani a la guitarra solista y el excelente bajista Javier Rocaberti. Unas fechas, que junto a las que nos ocupa, serán sin lugar a dudas, recordadas durante muchos años por los aficionados al género en nuestra tierra.
Volviendo a lo que fue el bolo, nada más sonar los primeros acordes de “Manicomio” la peña comenzó a danzar sin tiempo de parar, ni descanso para recibir un par de temas más, “Animales sueltos” y uno de más reciente cuño “Te seguiré”. Éste último, sonó fenomenal en directo, perteneciente al último álbum hasta el momento en estudio “Títeres”. Tras un pequeño paréntesis en el que el flautista saludó y se congratuló con los presentes, sonó impresionante la también nueva “Mono”. Para terminar pasando al tema “No hay ningún loco”, todo un éxito de 1986 y un hito en la carrera de la banda con nombre de bóvido; ya que por calidad y buen hacer en los más de treinta años que llevan en activo, aunque hubiera sido sólo por constancia se hubieran merecido alguna atención más por parte de la industria. Pero que le vamos a hacer, estamos en España y es triste hacer esta aseveración, todo lo que no sean “Bisbales” y similares según la época, parece ser que no les son rentables y menos aún políticamente correctos. No deja de ser increíble que de Ñu haya visto discos hasta en Argentina o que fueran muy populares entre el rockerío en Chile y otros países vecinos sudamericanos. Esto también se da en Europa y sobre todo en Alemania, donde saben apreciar el buen rock sinfónico y discos de Ñu, en tiempos donde la lírica y el sinfonismo predominaban más en su sonido y que se vieron plasmados en álbumes como “Cuentos de ayer y de hoy” o “A golpe de látigo”. Que son considerados autenticas piezas de coleccionismo en sus ediciones originales, alcanzando cifras astronómicas y no dejan de reeditarse y distribuirse compactos por doquier. En fin, para qué mencionar la frasecita de marras… Para “profetas” ya tenemos a los “gurus” de los medios.
Aterrizando de nuevo en la sala Vivero, otros temas que fueron cayendo por la propia historia de los mismos, durante la actuación fueron “La granja del loco” y la emblemática “El juglar”. Para esta parte del concierto, Molina decidió relajar algo el poderoso sonido que estaban desplegando y nos brindó la posibilidad de verlo interpretar precisamente “El juglar” con una guitarra acústica a modo de bardo del siglo XXI. Por supuesto, hubo espacio para el lucimiento a las seis cuerdas eléctricas por parte del actual hacha de Ñu, Manolo Arias. Miembro fundador de Niágara, ex-compañero del líder vocal del grupo que abrió la velada, Tony Cuevas y hermano de nuestro gran amigo Ángel Arias y gran bajista de Barón Rojo, también miembro fundador Niágara.
A mediación del concierto, comenzaron a caer temas más duros de la época de “Destierro” o la clásica “Preparan” para terminar con “De fiesta”. Éste último tema, compendio como bien es explicativo su nombre, de una consecución de solos de los distintos instrumentos del cuarteto, sucesivos duetos entre Molina y Arias e improvisaciones de piezas clásicas, versiones de Deep Purple como “Smoke on the water” o “Whole lotta love” de Zeppelin, entremezcladas con melodías de propio cuño. En medio de la interpretación de dicho tema, tuvo lugar un contundente y efectivo solo de batería de Javier Bumper. Y como no, la anécdota de la noche fue sin duda la interpretación de la popular canción “La cabra”, coreada por todo el público al unísono.
“El tren” fue el tema que eligió una pareja de fans exaltados, que no se lo pensaron dos veces y accedieron al escenario, el muchacho cantó al micro un par de versos del mítico tema coescrito por José Carlos Molina y Rosendo Mercado y la chica no se cortó un pelo y le dio un cariñoso beso al patidifuso Molina. Luego, José Carlos improvisó un eléctrico solo de flauta ante la estupefacción de su propia banda, toda una genialidad que solo alguien como un experimentado músico como Molina se podría permitir.
El clímax del concierto estaba en su punto más álgido y Ñu aprovechó dicha situación para ejecutar una versión más suave de “Tocaba correr” contenida en sus últimos recopilatorios, aunque en ese punto cualquier otra elección hubiera encajado igual de bien, pues el público estaba totalmente entregado. Siguieron auténticas perlas como “Perro ladrador” o “Imperio de paletos”. Para acabar el concierto con otra de las grandes canciones del esta noche cuarteto madrileño, “El flautista”. Entre el clamor de la basca, tuvieron que volver súbitamente entre acordes de Hendrix, perfectamente ejecutados se podía entrever que se iban a marcar una gran versión de “Hey Joe”. No podía ser mejor prólogo ante “Más duro que nunca” con la cual se despidieron de la forma más heavy, sabio botón de muestra del buen hacer de estos magníficos y pintorescos juglares de nuestro tiempo, que esperemos no tarden demasiado en volver por las tierras del Sur.
SET-LIST:
Manicomio, Animales sueltos, Te seguiré, Mono, No hay ningún loco, La granja del loco, El juglar, Destierro, Preparan, De fiesta, El tren, Tocaba correr, Perro ladrador, Imperio de paletos, El flautista
Bis: Hey Joe (Jimi Hendrix), Más duro que nunca.
ENLACES RELACIONADOS:
Web oficial de Ñu:
Perversion:
http://www.manerasdevivir.com/grupo.php?n=Perversion&id=752
Sala Vivero:
No te pierdas la galería fotográfica: “Ñu + Perversión – Concierto en Málaga – 03/03/2006”.
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