Dani "el Mono Loco", uno de los músicos más influyentes y luchadores de la escena independiente española, nos descubre los detalles del último disco de su proyecto musical: "Ingravito".
En abril de este año salía a la venta “Ingravito” el cuarto disco de Macaco que subió como la espuma en las listas de ventas y contiene singles como “Crece la voz” o “Sideral” que han sonado en las radiofórmulas y garitos nocturnos de todo el país. Tras el alter-ego de Macaco, se oculta un artista (Dani “el mono loco”) que está demostrando que se puede practicar la independencia musical en tiempos de supuesta crisis musical y sobrevivir. Edita sus propios discos en su sello discográfico “Mundo Zurdo”, pudiendo así, controlar absolutamente todo lo que rodea a la producción, desde las canciones que componen el CD, a los músicos colaboradores, pasando por el diseño y maquetación de cubierta, videoclips, etc. Con “Ingravito”, Macaco ha conseguido depurar al máximo su estilo y ha conseguido un sonido limpio, directo y personal.
En junio se acercó a Villacarriedo (Cantabria) para presentar su última creación y estuvimos charlando minutos antes del concierto con él. En esta entrevista, nos descubre todos los entresijos de “Ingravito” y se plasma la sinceridad y humildad de uno de los músicos más influyentes y luchadores de la escena independiente española. Sin desperdicio.
Muchas felicidades por tu último disco “Ingravito” (Mundo Zurdo, 2006). Tengo que confesarte, que después de mucho tiempo sin comprarme un disco, y sin tener ninguna referencia tuya anterior, al escuchar “Crece la voz” y “Sideral” en Radio 3, hiciste que al día siguiente me pasara por una tienda de discos y me lo comprara. ¿Qué hace que “Ingravito” sea un disco con canciones tan pegadizas y optimistas?
Un poquito con el tiempo, yo llevo ya cuatro discos, he producido discos de otra gente como “Los de Abajo” de Méjico, “King Chango”, he participado con muchas bandas. En la producción, muchas veces, a la hora de componer, se tiende a recargar mucho a poner muchas cosas. Con “Ingravito” lo que he intentado es sacar “la paja” e ir a la esencia de lo que yo he considerado la canción, que para mí es lo más importante.
Siempre he buscado mucho las canciones atemporales, las canciones que funcionan siempre. Soy un gran amante de las canciones de El Gato o Bob Marley que han hecho canciones que van a funcionar toda la vida. No es que me quiera comparar con esa gente, pero lo que se trata es de buscar buenos estribillos, intentar decir muchas cosas y poner lo que realmente necesita la canción. No por poner más cosas, va a ser mejor la canción. Como todo en la vida.
El disco comienza con una introducción en la que una voz en off relata lo que es para ti la palabra “Ingravito” en cuatro idiomas, que también queda reflejado en el libreto interior. La tónica general en las canciones es el optimismo, mensajes ecologistas, etc. ¿Te has planteado “Ingravito” como un disco conceptual, con canciones en torno a una temática común?
No, normalmente cuando hago un disco, lo primero que van saliendo son las canciones. Primero con la guitarra, la voz, después me meto en el estudio, voy probando cosas con el ordenador. No tengo una fórmula, pero lo que sí está claro es que a medida que voy haciendo del disco, el título de las canciones, me guía un poco en el título del disco. En este caso, con canciones como “Bajo un mismo sol”, “Con la mano levantá”, “Sideral”… que tiran mucho para arriba… la palabra “Ingravito”, que es una palabra un poco inventada, le va muy bien. Todos mis discos son así, por ejemplo, en “Rumbo Submarino” hay canciones como “Pirata de agua salada”, “Brujula pacá”, “Tempestad”, “S.O.S.” que tiran un poco al mar…
Este disco es un poco hermano de “Rumbo Submarino”, que fue mi segundo disco, el primero es un disco muy recargado, que cuesta un poco escuchar, “De las antenas a las raices” fue un disco grande, compuesto de dos discos, conceptual… Este (“Ingravito”) es un disco que tiene sobre todo canciones con una línea. Lo que intento es ir puliendo más e intentar contar muchas cosas de la forma más sencilla posible.
En tus anteriores discos hay canciones con diferentes dosis de hip-hop, rumba, samba, pop, etc. bien diferencidas. En este disco, esa mezcla ya no es tán clara y se aprecia una textura más uniforme. ¿Podríamos hablar de una evolución que con “Ingravito” ha encontrado el punto final, el “estilo Macaco”?
Yo lo que intento es ser crítico, en el buen sentido de la palabra, escuchando a gente que tengo a mi alrededor y que creo que tienen buen criterio, que me gustan sus opiniones, su manera de pensar y su manera de ver la música. Y realmente, ver lo que te va más a ti, lo que te queda mejor. Por ejemplo, en este paquete que nos meten del “mestizaje-fusión” muchas veces se tiende a una sobrecarga por querer tocar muchos estilos y yo siempre digo que, en Macaco hay variedad, pero en Macaco también hay unos límites, no cabe cualquier estilo. Por ejemplo, nunca se me ocurrirá hacer una polka… Más allá de todo eso está que la canción funcione, “Con la mano levantá” tiene un estribillo muy rumbero, luego el beat es muy seco, casi de hip-hop, pero a mí me da igual que una persona que la escuche saque esto o no, lo que realmente me interesa es si le mueve algún sentimiento, si le dice algo. Es lo mismo que cuando ves un cuadro, para qué vamos a analizar las pinturas, los colores, si lo importante es que te diga algo, que transmita. Yo lo que intento es que mis canciones transmitan. Yo sé si algo me gusta si “se me ponen los pelillos de punta” y si no, no me gusta.
¿Qué nos puedes contar de las colaboraciones de este disco? Las más sonadas son las de Muchachito Bombo Infierno y La Mari de Chambao, pero también aparecen en los créditos otros nombres como Nazao Zumbi, Ms. Maiko, Caparezza, etc.
Las colaboraciones simpre son de todos mis colegas. En Macaco siempre hay colaboraciones porque es algo natural en mí, yo siempre he colaborado con mogollón de gente y me gusta colaborar con artistas que me mole lo que hagan o me caigan bien. Aquí las colaboraciones son de gente que me he encontrado en la última gira y que habíamos coincidido en hacer algo juntos.
Muchachito y yo somos colegas y llevabamos tiempo con la idea de juntarnos y tocar algo juntos, ahora él me ha invitado para un disco que está haciendo con Kiko Veneno y Los Delincuentes y me hace mucha ilusión. A ver si encuentro un hueco en la gira… Con Muchachito hay super-onda! En “Crece la voz” pensé: “aquí le vendría bien la voz de Muchachito”, y quedó un tema redondo.
Con la Mari, coincidimos en un concierto. Yo no la controlaba tanto, sóla había escuchado los singles (de Chambao) que me gustaban mucho y ella me dijo que tenía todos mis discos y que le gustaban mucho. Una chica encantadora. Una chica que tiene mucha luz. En ese momento estaba trabajando en “Somos luz” y me vino ella a la cabeza, cogí el teléfono y la llamé, entonces, me dijo entusiasmada que la mandara la canción. Es una chica super-maja y que con muy poquito dice mucho, tiene un timbre muy especial, se la reconoce muy rápido con una forma de cantar muy personal.
También está B-negáo que lo conocí en Brasil junto con Nazào Zumbi que fueron los que mezclaron el maracatúm con el hip-hop, está Caparezza que es un rapero italiano, está Ms. Maiko una rapera canaria que todavía no tiene ningún disco, pero es maravillosa, etc.
(…)
Hay cantantes que tienen un registro increible y no te dicen nada. Es algo muy personal. Al margen de la técnica lo que importa es la personalidad. A mí todo el rollo de Operación Triunfo y las cosas que les dicen me parece patético. Muchas veces la técnica mata la personalidad, estar bien aprender, pero siempre tienes que saber mantener tus colores.
LFDL: Tu anterior gira paseó tu música por todo europa y medio sudamérica. ¿Cómo teneis organizada la gira de “Ingravito”?
Estaremos hasta noviembre de gira, iremos a Estados Unidos, ahora son más festivales por todo Europa… hay que trabajar, es nuestra vida, es la vida del circo, ¿no? Tienes que saber que lo que te queda es la carretera, llevo ya muchísimos años girandoy es lo que me gusta. A veces acabas super cansado todo el día para arriba y para abajo. Hoy nos han dado una cena de puta madre y me está entrando un sueño que te cagas, pero bueno, luego se me pasa. Cuando subo al escenario, me sale toda la alegría del mundo y consigo sacar toda la energía.
Para la gente que te sigue y que está empezando ahora en la música, qué consejos les podrías dar. ¿Cuánto tiempo llevas metido en el mundo de la música y cuánto esfuerzo te ha costado?
Llevo toda la vida en la música. Vengo de familia de músicos, ellos se quemaron mucho porque no se pudieron ganar la vida bien con la música. Cuando empezaba, pues lo típico de los padres, me decían que me lo pensara porque saben cómo es este mundo y se preocupan porque comas. Pero al final, lo que te tira es lo que te tira y si te tira desde dentro…
He tocado en muchos grupos, pero cuando monté Macaco, quería hacer las cosas a mi manera, que fuera mi proyecto. Trabajar con más músicos, pero poder marcar la línea. Simplemente, tras esperiencias anteriores, cuando todo el mundo opina es muy complicado. Es como en una película de cine, hay muchos actores, un guionista, pero tiene que haber un director. Yo lo que hice fue tocar mucho tiempo en la calle, en clubs, creer mucho en lo que hacía, me hacía mis flyers, iba por la calle convenciendo a la gente para que viniera a mis conciertos… en definitiva, luchar mucho, tocar mucho y creer mucho. Ir creciendo con el boca a boca e ir abriéndote camino, disfrutarlo, pero no parar.
Primero es ser músico, si luego te haces popular es una consecuencia de ser músico, pero no es al revés.
¿Cuál es tu relación con EMI?
EMI no es mi discográfica, ellos sólo me hacen la distribución del disco. Me he montado mi propio sello “Mundo Zurdo” que me ha costado muchos años, yo pago el disco, por eso es una movida, porque cuesta mucho dinero. Por eso le digo a la gente que si se lo pilla, que realemente nos apoya. Para que suene un disco bien, hace falta dinero, luego la distribución, poner el disco en las tiendas, para mí es imposible, por eso lo hace EMI, pero yo tengo el control del disco, de todo lo artístico, decido cuáles son las letras, el orden de las canciones, cómo son los videos… lo mimo todo. Para mí es mi vida y los discos son como mis hijos.
Para saber más sobre Macaco, puedes visitar su pàgina web oficial: www.macaco.to
Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 22 (sección: Entrevistas).
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