Conversamos con la banda, inmersa en su gira veraniega y preparados para centrarse en la preparación de su nuevo álbum el próximo otoño.
Desde que lanzaron su último álbum en estudio, “El poeta Halley” en 2016, no han dejado de girar y dar conciertos, tanto que su disco más reciente es el directo “El gran truco final” de 2018. Ahora están inmersos en una minigira veraniega que dará paso a la grabación de su nuevo trabajo con nuevas canciones.
Formada en 1997 en San Vicente dels Horts, en el área metropolitana de Barcelona, Love of Lesbians son una de las grandes formaciones surgidas de la escena de bandas independientes de los años 90 y una de las pocas que logró cimentar una carrera profesional mantenida en el tiempo. Tanto, que ha continuado en activo durante todos estos años sin interrupción.
A día de hoy cuenta con 8 álbumes en estudio, un disco en directo y la experiencia acumulada de un sinfín de conciertos dentro y fuera de nuestro país. Sus seguidores son legión, sus giras muy extensas y durante este verano está ofreciendo un espectáculo especial, con los músicos del grupo reforzados en el escenario con un trío de vientos (Alejandro Serrano, saxo; Ernesto Millán, trompeta; y Marcos Crespo, trombón), un percusionista (Marc Clos, percusión y vibráfono) y un intérprete de steel guitar (David Solé).
La formación actual de Love of Lesbian está compuesta por Santi Balmes (voz, guitarra y teclado), Julián Saldarriaga (guitarras y voces), Jordi Roig (guitarra eléctrica), Dani Ferrer (teclados y sintetizadores), Ricky Falkner (bajo y voces) y Oriol Bonet (batería).
Precisamente con este último, Oriol Bonet, es con quien hemos charlado sobre el estado actual de la banda, sus planes para grabar un nuevo álbum muy pronto y las actuaciones que están ofreciendo este verano. Como la muy próxima en Avilés, este viernes 23 de agosto en el festival Las Músicas, o las que después vendrán en Valencia (24 de agosto) o Málaga (14 de septiembre).
He visto que a lo largo de estos años habéis estado ofreciendo espectáculos en directo diferentes y uno que me ha parecido especialmente original fue “Mirallsi Miratges”, en el que combinabais música con teatro. ¿Qué espectáculo estáis ofreciendo este verano?
Desde que salió el disco “El poeta Halley” no hemos parado y cuando termine esta gira de verano nos vamos a grabar el nuevo disco.
En esta parte final de la gira nos apetecía mucho tocar con músicos invitados, aunque ya hicimos una prueba por el 20 aniversario. Y no digo colaboraciones, sino que estamos encima del escenario 11 músicos en esta gira. Llevamos tres metales, a David Solé que toca el metal Steel, Marc Clos que toca las percusiones… y es el décimo aniversario del disco “1999” que fue el que nos lanzó. Así que aprovechando esta efeméride, le hacemos un pequeño homenaje con temas de ese disco, aunque tocamos también otras canciones.
Cada año dais innumerables conciertos en toda España, también habéis tocado en varias ocasiones en Sudamérica… ¿Habéis tocado también otros países?
Hemos hecho incursiones en Londres, en Escocia… pero nuestro centro siempre ha sido España y Latinoamérica.
¿Se nota diferencia en la forma en que el público disfruta de vuestra música en directo entre Sudamérica y España? ¿Y entre el sur y el norte de España?
Sí que hay ciertas diferencias. Una cosa que nos gusta mucho es que todo el mundo de conoce las canciones y eso es mucho de agradecer. Pero sí es cierto que en Sudamérica hay mucho más fervor. En nuestros conciertos es un no parar de gritar. En España tenemos un gran público en Madrid o en la zona centro, es un público que lo da todo. En Cataluña es un público que lo vive más por dentro, de otra manera. Y en el sur hay más fervor también. Pero en líneas generales, todo el mundo nos acoge bien.
Comentas que en Sudamérica el público tiene un fervor especial. Me gustaría saber el grado de proyección que tenéis allí, si sois un grupo superpopular o si el impacto es en cierto circuito de oyentes…
En Latinoamérica hemos tenido mucha suerte. Y cuando hablas de Latinoamérica no hablas de una zona, sino de países… En México tenemos una gran acogida, hemos hecho festivales potentes y el Auditoria Nacional, que fue en el último vuelo y tocamos ante 10.000 personas.
En México tenemos una expansión mucho mayor que en Perú, Chile o Argentina. En esos países nos conocen, hemos ido, pero quizás no tengamos la misma repercusión que en México.
Nuestra proyección es seguir trabajando mucho México, porque no solo es un país de entrada a todos los que nos faltan de América y no solo Latinoamérica, sino a Estados Unidos. Es una pata que tenemos pendiente y queremos trabajar bastante Estados Unidos en la siguiente gira y el siguiente disco.
Tenéis tres primeros discos en inglés y vosotros marcáis una gran diferencia entre una primera etapa con esos discos y una segunda etapa cantante en castellano. Ahora que comentas que vais a trabajar para conquistar al público de los Estados Unidos, ¿es posible que compongáis algún tema nuevo en inglés?
Que va. Empezamos por ahí porque teníamos 16 años y lo que escuchábamos era anglosajón y americano. Empezamos a cantar en inglés, porque sentíamos que era como teníamos que empezar a cantar o tocar… Pero también nos dimos cuenta que tenemos un gran letrista y frontman, como es Santi, y que la gente tenía que entender sus letras. Sentíamos que Santi tenía que proyectar mucho mejor su parte lírica y entendimos que tenía que hacerlo en castellano.
A partir de ahí hicimos el cambio hace 5 discos y de ahí no nos vamos a mover. Volver al inglés es algo impensable. Hacer algún guiño no te digo que no. Por ejemplo, ahora tenemos contacto con Roger Hodgson. Y si nos llama y nos dice que si queremos tocar con él en un tema, y en inglés, pues lo hacemos encantadísimos.
Nuestro objetivo es seguir desarrollando nuestra parte lírica y a partir de ahí ya veremos cómo evoluciona. Pero yo creo que de momento no nos movemos de ahí.
Repasando vuestra historia y vuestra discografía, he visto que entre el año 1999 y 2009 teníais un ritmo de un álbum cada 2 años. Y que desde 2009 hasta la actualidad, habéis publicado dos discos en estudio y uno en directo. Me gustaría saber si esto es una casualidad o que según se van acumulando discos, es más difícil encontrar inspiración o argumentos diferentes para las canciones…
Lo que nos ha ocurrido es que entre 1999 y 2009 girábamos menos y teníamos más tiempo para entrar en estudio y grabar. Desde que salió el disco “1999” hemos tenidos giras, algún año con 120 bolos, y tienes menos tiempo para grabar. Al principio era un poco más indie, pero cuando empiezas a generar un mundo propio, te das cuenta que tienes giras de 4 años, entre que atiendes al mercado español, a Latinoamérica… Y lo que nos ocurre es que entre un disco y otro pasan 4 años.
Antes comentábamos que consideráis que vuestros primeros tres discos y el resto son etapas muy diferentes. ¿Las canciones de esos discos las tenéis totalmente aparcadas o retomáis alguna para algún concierto o alguna ocasión especial?
Es una época con la que ahora no tenemos nada que ver. Pero siempre hemos pensado que de las canciones del último disco en inglés, “Ungravity”, no nos importaría hacer una versión en castellano. Es algo que Santi y yo hablamos bastante y nos apetecería mucho.
Es algo como, por ejemplo, que a veces nos han llegado ofertas de hacer algunos temas en italiano, que no está abandonado, pero tampoco es una prioridad en este momento.
Vuestro primer disco se publicó en 1999, pero vosotros ya habíais comenzado en 1997. Y los años 90 fue la década en la que surgió la primera oleada de grupos indies en nuestro país. Nombres como El Inquilino Comunista, El Niño Gusano, Australian Blonde, Manta Ray… Grupos que los jóvenes oyentes de sonidos indie de hoy no conocen. ¿Pensáis que son grupos a revindicar y que se les podría dar a conocer al público joven de alguna manera?
Casi todas esas bandas cantaban en inglés. Se recuerda más a una banda como Los Planetas, que fueron los que empezaron a revindicar el rock en español. De aquella época una banda que era mi obsesión eran Manta Ray. Los veíamos tocar y decíamos, tenemos que ir a ahí, aunque ahora no hacemos nada parecido a Manta Ray.
Hemos mamado esa música y hemos aprendido muchísimo de esos grupos. Yo estaría encantadísimo de recordarlas y hacerles un pequeño homenaje. Es bonito recordar el tiempo del que vienes.
Habéis sido testigos de excepción, gracias a todos los años que lleváis en activo, de la evolución del circuito de salas y festivales. ¿Cómo veis los cambios que se han producido en estos años?
Nos hemos chupado un montón de salas donde el sonido no era el más adecuado. Estaban acostumbrados al punk rock y llegaba una banda de pop y era complicado. Pero tampoco era lo que buscabas, sino simplemente tocar y tocar.
Hoy en día nos hemos vuelto más profesionales. Y ya no solo en el sonido, sino en el espectáculo, pues nos hemos fijado en muchas bandas “guiris” y en cómo trabajan. Pero tengo grandes recuerdos, como la gira que hicimos con “Microscopic Movies”, que le llamábamos la Tupperware Tour, porque lo único que hacíamos era ir en la furgoneta y comer de tupperware. Pero lo pasamos increíblemente bien y fue muy bonita.
Luego vinieron los festivales y han ayudado inmensamente a dar a conocer nuestras bandas. Aunque también determinaban qué debían hacer los grupos, porque si en un festival tocas a la 1 de la madrugada, quieres fiesta, bombo a negras y un beat subidito… Entonces, creo que los festivales han traído cosas positivas, pero nosotros siempre hemos apoyado a las salas. Y siempre que hacemos giras hacemos gira de salas. Recuerdo que el bolo que hicimos anterior al WiZink Center, fue en Vitoria en una sala delante de 800 personas. Y eso para nosotros es muy importante. Cuando llegas “arriba”, hay que saber de donde vienes y vienes de un montón de salas.
Otro aspecto en el que habéis sido espectadores de excepción, en la evolución de la industria discográfica y el cambio de hábitos de los oyentes para disfrutar de la música. Cuando empezasteis, el formato disco como algo físico era fundamental y marcaban los ciclos de los grupos. Ahora el público disfruta la música en streaming y el single y el videoclip tienen mucha importancia. ¿Os costó adaptaros a este cambio de situación?
Nosotros no hemos variado nuestra forma de componer ni de producir. El otro día hablaba con Arkano y le decía que estaban revolucionando la industria, porque están firmando no por discos, sino por canciones. Y eso para mí es revolucionario.
Cuando nosotros empezamos la finalidad era grabar un disco. Y hoy en días es girar. Y me hago un disco para poder girar. Y antes era al revés, entre disco y disco hago una gira. Ahora entre gira y gira hago un disco.
Yo tengo un hijo de 17 años y alucino. Accedes a Spotify y puedes escuchar lo que quieras. Cuando yo tenía 17 años tenías que a Carrer dels Tallers en Barcelona a comprar un disco y te dejabas una pasta y escuchaban el disco durante 4 meses. A ellos no les pasa. Hoy en día se escucha muchísima más música que antes. Para mí, esto es una evolución genial.
En Love Of Lesbians nos sigue gustando hacer discos, con conceptos completos y encapsulados en un disco. Quizás algún día nos guste firmas por canciones, pero de momento seguimos trabajando de esta manera.
Cuando un grupo comienza, tiene una motivación, una ilusión y unos objetivos… grabar un disco, hacer giras… Vosotros que lleváis un montón de años, habéis tenido un éxito tremendo y ya habéis conseguir los sueños de otros muchos grupos. ¿Qué os motiva para continuar?
Me seguirá mereciendo la pena hasta el día que me suba a un escenario y no sienta nada. Mientras me alucine, seguiré disfrutando y esto es lo que quiero hacer.
Por otro lado, la gente solo ve cuando te subes al escenario. Pero una parte realmente bonita de nuestro oficio es meterte en el local de ensayo y ver cómo nacen las canciones. El momento en el que te encierras en un ensayo con tus colegas, empezar a hacer un tema nuevo y que de la nada salga una canción, eso es brutal. Y mientras siga disfrutando de eso, yo seguiré tocando.
Antes comentabas que tenéis pensado grabar un nuevo disco cuando terminéis los conciertos de verano. Me gustaría saber si ya tenéis algunos temas compuestos o tal vez ya definido el concepto del álbum o si cuando terminéis la gira os centraréis en concebir totalmente de cero el álbum…
Lo que hemos hecho durante esta gira es ir de vez en cuando al estudio y hemos ido elaborando algunos temas. Tenemos ya como 15 o 16 temas trabajados y en un par de meses nos encerraremos unas semanas más para hacer una demo de unos 20 o 25 temas, de los cuales escogeremos los 11 que irán al disco.
¿Los productores estáis siendo vosotros mismos o vais a contar con un productor externo al grupo?
Contamos con la figura de Ricky Falkner que es nuestro gran productor. Empezó con nosotros con “Ungravity” y fuimos la primera banda que confió en él para hacer un disco y hoy es el productor de los grandes discos del circuito de los últimos 10 años. Además, hemos conseguido que sea nuestro bajista. Es uno de los grandes productores de nuestro país.
Pues nada más, salvo darte las gracias y dejarte espacio por si quieres añadir algo más para nuestros lectores…
Nos flipa y nos encanta volver por la zona de Asturias y de hecho yo vengo de vacaciones de por ahí. Además, te diría que somos unos grandes gastrónomos y por ahí se come increíble y nunca nos importa volver a ir a tocar.
Que la gente se acerque a vernos, quien nos conozca que venga a disfrutarnos mucho y quien no nos conozca, que se acerque, que nos conozca y a partir de ahí que también disfrute de Love of Lesbians.
Video con la interpretación en directo de la canción “El truco final”, incluída en el álbum en directo “El truco final” (2018)
Más información:
Web oficial: https://loveoflesbianband.com/
Twitter oficial: https://twitter.com/loveoflesbian
Facebook oficial: https://www.facebook.com/loveoflesbian/
Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 26 (sección: ).