Kerobia: Sólo sabemos que nos encanta la música…

Kerobia es un grupo vasco que acaba de editar su primer disco. Nacieron en el año 2001, cuando Mikel Zorrilla (voz y guitarra) y Xabi Fernández (batería) decidieron seguir juntos haciendo música, tras sus primeros pasos juntos en el grupo Sushar, el cual se acaba de disolver.

Poco a poco fueron perfilando el proyecto y ampliando la formación hasta su actual configuración de cuarteto, en la que Germán San Martín se encarga de los teclados y Karlos Ortíz del bajo.

Durante éste tiempo han grabado algunas maquetas, actuado en numerosas ocasiones y ganado un par de importantes concursos… el Concurso de Pop-Rock de la Universidad Pública de Navarra y el Villa de Bilbao como mejor grupo de Euskadi y Navarra.

El pasado verano lo dedicaron en gran parte a registrar lo que ahora es su disco debut, un álbum editado por GOR en el que apuestan por un rock melódico, potente, pegadizo y accesible.

·  El grupo se creo en el año 2001, por Mikel y Xabi, aunque pronto se incorporó Germán. Los dos primeros ya habían estado juntos en Suhar… ¿qué os impulso a crear el nuevo grupo? ¿había una idea prefijada sobre como sería la música de la nueva banda?

Bueno, en realidad el grupo lo formamos entre los tres. Xabi y yo habíamos compartido otra experiencia musical en un grupo llamado Suhar. Un grupo inexperto que se inclinaba mas por el metal vasco con melodías pegadizas y con mucha cantidad de coros y dúos. Cuando se deshizo el grupo, Xabi y yo y mostramos nuestro deseo de seguir impregnando nuestra vida con música, ya que es algo que nos apasiona.

Xabi me habló de Germán. No lo conocíamos como músico, y yo ni siquiera como persona. Los únicos datos que teníamos sobre él eran; que sabíamos que era otro apasionado de la música, y que sus grandes conocimientos de piano en el conservatorio nos podían servir para experimentar nuevos sonidos de teclado para nuestras canciones.

Le expusimos nuestro proyecto y le contagiamos con un poco de nuestra ilusión y así emprendimos un camino que hoy en día seguimos recorriendo juntos.

·  Al año siguiente grabasteis una maqueta casera con los primeros temas que teníais… debió ser un trabajo arduo pero divertido. ¿Cómo fue aquella grabación? ¿Teníais conocimientos de grabación y producción?

Ver plasmados nuestros temas en un cd es algo que nos gusta mucho. Muchas veces la perspectiva que obtiene el músico al tocar sus canciones en el local no es del todo objetiva o completa. Es por esto que siempre nos ha gustado podernos escuchar “desde fuera”, por decirlo de alguna manera. Además es también una forma de poder enseñar tu trabajo a otras personas.

Desde este punto de vista decidimos afrontar el reto de una grabación. No teníamos dinero ni material, salvo los escasos pero valiosos conocimientos de Germán con su ordenador. Fue un trabajo duro y muy laborioso, pero a su vez tremendamente divertido y enriquecedor.

El resultado no fue del todo malo teniendo en cuenta en las condiciones que se grabó, sin embargo no pudimos plasmar en la maqueta todo lo que en ese momento nos hubiera gustado.

·  ¿Para qué utilizasteis esa maqueta?

Sobre todo nos sirvió como referencia para nosotros. Nos sitúamos como grupo. Enseguida notamos la necesidad de un bajo, que lo grabé yo mismo, ya que en el anterior grupo (Suhar) tocaba el bajo. Sin embargo, y aunque la repartimos entre los conocidos y la recepción de la gente fue muy buena, no quisimos difundir la maqueta a los cuatro vientos. Nos parecía que tenía carencias muy importantes en el sonido y que la gente podía hacerse una idea equivocada de nuestro grupo.

·  En el 2003 entró Karlos al bajo. ¿Cómo contactasteis con él?

Después de editar esa maqueta casera, nos pusimos a buscar un bajista. Hablamos con unos cuantos. Entre otras muchas referencias nos dieron el nombre de Karlos, quien vino a conocernos como personas y como grupo. Le dimos los temas que habíamos grabado, y nos escuchó en algún ensayo. Enseguida entendió la esencia del grupo y como a nosotros también nos gustó su forma de ser y de tocar, formamos el actual cuarteto que se conoce por Kerobia.

·  A partir de aquí comenzasteis a trabajar en más canciones y disteis vuestros primeros conciertos como cuarteto… ¿qué tal fueron esas primeras experiencias?

Primero adaptamos las canciones que hasta entonces tocábamos como trío a la nueva composición del grupo. Con esto y alguna versión, comenzamos a recorrer tablados y a enseñar nuestra música en directos. Los nervios y la falta de costumbre en el escenario, hicieron que las cosas no salieran tan bien como nos hubiese gustado en muchos momentos. Sin embargo resultó una tarea preciosa y que nos ha enseñado muchísimo.

·  Poco después ganáis el Concurso de Pop· Rock de la Universidad Pública de Navarra, ganáis 600 euros y los invertís en una nueva maqueta junto a Iker Piedrafita… ¿qué tal fue la experiencia de grabar con él? ¿cuánto tiempo invertisteis en esa grabación? ¿qué tal el resultado?

El concurso de Pop· Rock de la Universidad Pública de Navarra (Nafarroako Unibertsitate Publikoa) consistía en dar un directo junto con otros grupos. Nos proclamamos ganadores y conseguimos 600 €. Al unísono decidimos que ese dinero sería para realizar una maqueta en condiciones. Algo que poder mostrar a todo el mundo, algo que nos convenciera por completo a nosotros mismos.

Decidimos que con las posibilidades que teníamos el estudio de “El Sótano” de Iker Piedrafita era muy adecuado. Dedicamos 1 semana a la grabación de 8 temas y otra semana a las mezclas. Estuvimos muy a gusto con Iker, y quedamos muy satisfechos del resultado, a pesar de que ahora echemos la vista atrás y no nos gusten cosas que en su momento decidimos así.

·  Esa maqueta la presentasteis al concurso de maqueta de radio Euskadi Gaztea del que además resultasteis ganadores. Parece ser que para vosotros los concursos han sido muy positivos… ¿se los aconsejáis a otros grupos? ¿pensáis que si no hubieseis obtenido buenos resultados os habría “dañado la moral” para seguir con la banda?

Cuando tuvimos terminada la maqueta grabada con Piedrafita, faltaban muy pocos días para que concluyera el plazo para mandar las maquetas al concurso de la radio Euskadi Gaztea. Aunque no lo teníamos planeado, decidimos que podía ser interesante inscribirnos en dicho concurso. No estaba en nuestra mente la posibilidad de ganar.

Proclamarnos ganadores de este prestigioso concurso nos pillo de sorpresa y dio un vuelco en nuestro camino como grupo. Así como nuestra intención siempre ha sido, y sigue siendo, hacer música para disfrutar de ella, el ganar ese concurso hizo que la gente conociera el grupo. Por lo tanto podemos decir que nosotros no cambiamos, pero si que cambio la relación entre el grupo y el oyente. Empezaron a sonar nuestras canciones en la radio, los periódicos hablaban sobre nosotros…

Por lo tanto es cierto que este tipo de concursos han sido positivos para el grupo; creo que son positivos para todos los grupos y para la música en general. Me gustaría subrayar que junto a todas las cosas buenas que tiene ganar un concurso, tiene también algún riesgo. La gente te puede identificar por haber ganado algo únicamente, sin conocer la esencia del grupo. Veo como básico, que a un grupo se le debe conocer por su música y por su forma de ser, y no por otros motivos.

·  A partir de aquí surgió el fichaje con GOR… ¿cómo se produjo el contacto y posterior relación con el sello?

Uno de los premios de ganar el concurso de maquetas de Euskadi Gaztea era la actuación en el prestigioso Kafe Antzoki de Bilbao. Dio pie a que conociéramos a la persona que trabaja allí como técnico; Jota. Podemos decir que se enamoró del grupo, y desde entonces lo hemos tenido al lado para todo. Nos ayudó a la hora de conseguir el tan deseado vínculo con el sello Gor; trabajó con nosotros en la preproducción del disco, y estuvo con nosotros durante toda la grabación y producción del disco.

·  El pasado verano lo dedicasteis a conciertos y a grabar vuestro primer disco… ¿qué nos podéis contar de todo el proceso de grabación? ¿fueron duras esas tres semanas que os llevó?

Dejamos de dar conciertos en Julio para dedicarnos plenamente a la preparación del disco. Nos encerramos durante más de un mes en el local cuidando todo tipo de detalles, arreglos y sonidos… preparando lo que para nosotros siempre había sido un sueño inalcanzable.

Antes de eso, un fin de semana de Mayo, grabamos todos los temas nuevos que no los habíamos metido en la maqueta, en el estudio “Musikorta”, que Jota tiene en Amoroto (Bizkaia). Esta fue la base del trabajo que realizamos en el local las semanas antes de introducirnos al estudio, escuchando siempre las experimentadas opiniones de Marino Goñi (Gor) y Jota.

El 16 de Agosto empezamos a grabar en “Studios K” de Pamplona, donde contamos con el trabajo como técnico Alberto Porres junto con el siempre presente Jota.

Teníamos la idea de lo que buscábamos muy clara y todos los cabos bien atados, fruto de las largas horas de ensayo. El buen ambiente de trabajo y la magnífica asesoría que teníamos hizo que todo saliese como esperábamos durante las tres semanas de grabación.

Las ganas de que todo transcurriera correctamente y el ánimo de perfección hizo que se vivieran momentos de tensión y momentos aburridos. Sin embargo, en general, el ambiente fue inmejorable y la experiencia irrepetible y muy enriquecedora. Es un trabajo que en ocasiones resulta duro y pesado, pero a su vez es muy gratificante cuando escuchas el resultado.

·  En el disco habéis contado con colaboradores destacados, miembros de Berri Txarrak y Leihotikan, además de otro puñado de músicos, incluido un cuarteto de cuerdas… ¿qué tal ha sido la experiencia de trabajar vuestras canciones con todos esos recursos?

Todas las colaboraciones y músicos de estudio los meditamos muy detenidamente a la hora de decidir los arreglos y el toque que le queríamos dar a cada canción.

En dos de las canciones introdujimos un cuarteto de cuerdas; un atípico sólo de trompeta adornó otra canción; y las conocidas voces de Gorka Leihotikan y Gorka Berri Txarrak completaron nuestra música.

Como siempre, el trabajo más duro fue el previo a la grabación; también en lo que a este aspecto se refiere (escribir los arreglos de cuerda…). En cambio, la excelente disposición de todos los músicos y colaboradores, y la complicidad creada dentro del estudio, fueron clave para conseguir un excelente resultado.

·  Y sobre los productores, Marino Goñi y Jota… ¿qué os han aportado?

Estamos muy agradecidos a ellos. Han conseguido que nosotros creamos en los que hacemos; que seamos nosotros mismo quienes decidiéramos e hiciéramos las cosas a nuestra manera, con nuestra propia personalidad. Yo creo que es el mejor apoyo que pueden dar los productores: lejos de mandar y ordenar cómo deben ser las cosas, sus palabras siempre han sido de ánimos y de consejos. Consejos, que por supuesto hemos tenido muy en cuenta ya que la experiencia y conocimiento de ambos está más que demostrada.

·  ¿Qué tal de contentos estáis con el resultado?

Estamos muy contentos. Pensamos que a pesar de ser un disco primerizo, es un disco muy trabajado y que refleja a la perfección nuestra personalidad. De todas maneras, probablemente dentro de unos meses podamos hacer una valoración más objetiva sobre nuestro disco.

·  Visitando la sección de enlaces de vuestra página web se pueden intuir vuestra influencias, aunque algunos de los grupos allí incluidos no es evidente que tengan relación con vuestra música… ¿qué grupos os gustan? ¿cuáles tenéis como “referentes”?

Si alguna palabra simboliza nuestras influencias es “diversidad”. En mi caso, admiro a grupos del panorama actual vasco como Berri Txarrak, Sen, Leihotikan… pero rompo todo tipo de fronteras geográficas, fronteras estilísticas y fronteras temporales cuando escucho y aprendo de grupos como The Beatles, Simon & Garfunkel…

Y aunque tengamos puntos comunes, cada unos de nosotros aporta un abánico enorme de influencias que conformar Kerobia. Desde grupos metaleros hasta el jazz, pasando por el pop británico que apadrina la melódica voz que lidera nuestro grupo.

·  Y para terminar… ¿cuáles son vuestras aspiraciones como grupo?

Nunca hemos planificado nada para el futuro. No lo hacemos tampoco en este momento. Sólo sabemos que nos encanta la música, que disfrutamos en cada concierto, con cada acorde… Lo que queremos es poder seguir disfrutando de ella en el futuro. Para ello aprender y madurar musicalmente hablando. Confundirnos una y otra vez hasta aprender cómo no hay que hacer las cosas. Y junto con esto, poder transmitir a la gente mediante nuestra música, eso que nosotros sentimos. Como grupo de música no somos más que un niño en la adolescencia, sólo queremos seguir recorriendo este camino que tantas satisfacciones nos produce.

Entrevista por: F-MHop
(Fecha de publicación: 23/12/2004)