Kako: No Te Arrepientas

Kako la resistente banda barcelonesa de punk y punrock guitarrero, de indiscutible compromiso social y musical, recrea su sonido en su nuevo álbum con estupendas y exquisitas franjas de innovación.

1.- Rojo y claroscuro.

Buen título. “No te arrepientas”. Y es que como no quieren en las cámaras del diseño humano que pensemos, y seguimos siendo su danza macabra, no hay que arrepentirse por no perder el tiempo adulterado y tratar de ser vida y constancia.

Por eso unos pájaros atraviesan entre un coche y unos edificios en rojo sangrante la portada del nuevo álbum de Kako y después descansan, o acechan, en la contraportada en un árbol sobre un fondo en claroscuro de nubes y cielo con su sinfonía girsácea. Y por eso, 10 temas con su inconfundible logotipo: un punky cubierto con un pañuelo y una @.

Kako son, según su mypace http://www.myspace.com/kakopunkrock no se lee bien en el libreto del disco: Albert: guitarra y voces Kankam: bass & voices Kiko: Guitar & chorus Perla (pearl) Bateria & chorus.

El trabajo lo edita el sello Grita o Muere del colega Alejo. Sello, banda y colega del que os he hablado muchas veces en mis libros, en comentarios y en reseñas sobre producciones suyas.

Disco con el que me pongo tras asistir a una rueda de prensa en ROCA EDITORIAL que cubro, cobrando, para el Xornal de Galicia.

2.- Sin arrepentimiento.

Ni tan siquiera, creo, de lo que no has hecho. La redención es un cruce entre salvapatrias e iluminad@s mesías que bendicen cromos de insensatez. Por eso me parece magnífico el pensamiento de la excelente novelista Catherine O´Flynn, cuando comenta que “A veces las palabras deben decirse. No hay una segunda oportunidad.” (elpais.com, 10-09-09, entrevista de Rosa Mora).

Los días no están muy elásticos y no somos ni espejismos de lo que un día socialmente se pudo ser como humanidad. Retales y saldos infectos armonizan un croquis de desamparo donde el hambre es autoridad en colas de desolación y miseria. Así que no nos arrepintamos de escuchar “No te arrepientas”, primer toque de atención del disco… Dos guitarras rasgan el dolor con escasos segundos de diferencia – 2 y 4s- rajando el tiempo que es su valor. A los 14s la voz rompe la trama y exige a los que te hacen callar y exige a los que son dinero y muerte que no intenten dar pena. Banda curtida en el punk demostrado a los 28s. Estribillo y letra dejan claro el mensaje. El sonido a los 57s hasta el 1m01s recaba una mínima inflexión tras la advertencia a la especie de mierdas en cuestión. Acumula un riego sanguíneo contagioso la bataca del 1m10s hasta el 1m34s, volviendo al placaje duro del principio del tema que nos envuelve arrimándonos a los 2m04s con la idea de que sufra el asco alguna vez. Riffs de punk en los 2m05s practicando un instrumental de guitarras engrasadas de punk y de punkrock cuyas secuencias se estiran y a los 2m31s ofrecen una estación de compás que rima con las cuerdas, atacando duros a continuación. Un inicio de disco en el que la batería serena y es cómplice a eso de los 3m04s en el paradigma de sangre. “Sangre x sangre”, cae en la nómina de cortes. Canal meteórico y camino sobre el acecho que nos hace vidas a flor de represión, pero hay que construir pálpitos deconstruyendo el hábito corrupto que nos agrede. Canción y poema de punk acelerado, marcado por afiladas guitarras voz y batería más rasgados, a los 23s hasta los 36s estructura guitarrera como un silbido subterráneo, voluntad a pesar de las marcas del patíbulo diario. Coros, venganza, ¿tal vez? Desde el 1m06s un punk más clásico el contraste de cantar a dos voces entre el 1m26s hasta el 1m40s, todo ello continuado por un drástico riff lejano que da fe de la resistencia. Filtros musicales posteriores contemporizando el sonido y una bella guitarra de conceptos melódicos, melancólica, dispuesta al riesgo (3m08s) de hoguera encendida en varios planos de sonido. Esta gente nos da punk y guitarras maduritas. Han subido el listón.

3.- de un tirón noticias y algo más.

Sábado. Un fin de semana más de trabajo. ¿Jodido? Claro. El PP rechina entre una decrepitud corrupta. Esa es su cautivadora España rota. La única. A Pilar Manjón la amenaza de muerte el fascismo, la ultradereceha y esa emisora de la curia que la ha llamado de todo y ha incitado al odio. Noticias musicales. Buen cartel de bandas para el cartel definitivo del Derrame Rock 2009:

Made in Bilbo de Gris Perla presentado, La huella también presenta álbum:

Y hay mucho movimiento en Subterfuge. Claro está que también ha salido un nuevo nº de Rock Estatal, el séptimo en el escalón:

Y precisamente los cántabros Soul Dealers se marcaron un directo con Def Con Dos. Y la 3ª canción de la que ocuparnos es “Torturan”. Una columna agreste de música y letra a dos voces contando un secuestro más que acaba en el mensaje del título. Nos encontramos de los 18 a los 22s con microdetalles de sonido más grave, secundados por la batería que refiere la claustrofobia del dolor y a los 23s las guitarras se prolongan sangrando. No hay cicatrices, grito a los 37s. La garganta susurra. Las dos voces se alternan sin acoplarse resultando muy técnico. De una unión de guitarras a los 48s pasamos a un seductor punkrock al 1m08s y 10s después aun encaje perfecto de una guitarra escenificando un giro en el tema que se aprovecha para recitar el horror. Riffs desde el 1m37s hasta los 2m01s materializando en sus bifurcaciones la rabia severa con una proximidad punky proverbial, encauzando la intensidad del dolor hasta el final. Así las cosas “,¿qué es lo que han hecho de ti?” es un enlace necesario como 4º tema. Poema en la letra e instrumentación en acordes inquisitorios, ondulados, rizándose unos sobre otros durante 20s para calmar el tiempo y deambular sobre los 40s el hecho de un retorno para salir de de un encierro y dificultades. Hasta los 59s el sonido se expande en los compases iniciáticos. Nos encontramos en piezas encajadas en un tema producido con esmero. Ni futuro, ni pasado, cromos repartidos en el diseño. Fracciones musicales de infraestructura de un punk que excava profundidades del 1m23s, a ritmo de batería, hasta el 1m40s, más flexible posteriormente. A los dos minutos la escala musical hierve, nos ataca, es pulpa y un trago de riffs de rockeros de los 2m11s a los 2m31s, apoyado en mallas de electricidad, muy constante. La tragedia está mascada, soledad crápula en sí. Variaciones de los registros señalados y a los 3m13s varias voces en distancias cercanas y lejanas. Otra de esas canciones de las mejorcitas que he escuchado este 2009 y el más largo del disco, que da paso a “Guerra abierta” con la foto del fotograma final del Planeta de los Simios con un Charlton Heston arrodillado. Película que han pasado hoy por un canal privado. Ya es casualidad.

Una grabación como intro ya nos habla de la incoherencia bélica, del mausoleo marcial. A los 17s sonido de vieja escuela, visceral descarga de Kako con batería, guitarra y bajo y el hecho hipócrita del negocio de la paz como producto de la guerra. Pacificación que son campos de exterminio, como sabiamente titularon hace años un disco suyo los Envidia Kotxina. Velocidad punk sin aliento, pequeños acordes como a los 53s entre la base sonora. Al 1m13s, sobre el 1m21s, instantes como pequeños claros. Guerra abierta de crimen organizado, terrorismos estatales y empresariales. Al 1m28s guitarras raudas, obsequiosos, siendo un vaivén ambiental, sagaz. Reinos de muerte, s lo que hay, banderas de cadáveres. Y la voz de Charlton Heston en la playa maldiciendo las guerras y a la especie humana.

4.- Sin atenuantes.

Y sin edulcorantes, libre de la enajenación violenta, pero en las fosas de una violencia llega “Lady Lokura”. Tema que radiografía carne, piel, mirada de una destrucción. Acordes peregrinando en 9s a un boceto de guitarras, un alud, hasta los 19s, ejercitando puntos sonoros que de los 28s a los 47s modulan al intemperie del drama para ser cintura punk de dos guitarras y cuña punk de otra y la batería hasta el 1m05s y microungüento de punkrock al 1m25s. No se puede olvidar. El sonido al 1m37s transpira hasta los 2m09s la intriga que nos sirven unos riffs en progresión a dos bandas, junto con la batería y el bajo ardiendo de fuerza en el grito existencial de querer vivir. Voluntad meteórica y rockera a los 2m48s con un final clásico.

“Extrarradio 666 FM” cruza el misterio desde su letra. Un cuento de miedo que rueda 35s y se hace grava, dureza, diana en el rugir de la voz y la complicidad de las guitarras. Un trayecto sin reposo, rápido, nada lánguido. Un coleccionista de cráneos de sus víctimas, je,je.

Muy de cerca le sigue otro bólido hecho canción. “Rómpete los dientes”. Un trazado sin concesiones, no es grotesco, para quién neutraliza la realidad y no la digiere. Para espabilarse y ser vida inteligente, resistencia. Arranca en un crepitar de bajo y batería y una línea de 12s de guitarra, apunta una nueva sección hasta los 20s que mantiene, siendo cauce de las cuerdas de los 40s a los 57s en la playa de la recomendación de salir del bloqueo caníbal. Ritmo y compás más pausado, embriaguez de tristeza y de esperanza a partir del 1m40s en el volumen. Un nuevo giro apreciable, desde los 2m12s extensión musical y a los 2m29s hasta los 2m56s apasionante cascada de guitarras muy bellas. “No te arrepientas” es un disco muy bien grabado.

5.- Unas birras.

Un par ó tres. Noche del domingo. Leer, escribir en un bar del barrio hablando con Arnold, su encargado, un colega de Ecuador. Algunas cosas más. Flipo con una falsa pareja vestida de “alternativa” que pide que le cambien céntimos en billetes tras liar un sarao entre la clientela y le roban a un joven camarero emigrante dos euros de una propina en un plato, jodiéndole el rollo, provocando una violencia idiota. Se lía un mal rollo que da asco y es que el asco no nos pone firmes, ni es revolución. Requiem para esos dos gilipollas.

“Requiem” es el 9º tema elevado en un sonido cañero en una conversación con la muerte. Un intento de dribling, de memoria y de silencios. Pendenciero en los tonos desde los 16s con unas guitarras desafectadas en minúsculas secciones en un camino nada inocente como el propio mensaje de la letra. De fondo desde los 47s una melodía armónica., al 1m06s tiempo para el vértigo de las guitarras hasta el 1m17s. Disyuntiva como mensaje, ¿irse/quedarse? Del 1m45s al 1m55s espacio sonoro reflexivo como reprise acuchillando el aire. Meditado, a raíz de una lujuriosa bataca. Dos guitarras basculan límites (2m17s), a los 2m30s incluyen una sintonía de sombras acorde con el mensaje.

“Véngate”es un ciclón de este ciclo con un punk ejecutado a dos voces. Sonido más clásico en sus primeros 20s. Calles, golpes, guitarras de nuevo hirientes, como magulladuras. A los 41s y a los 52s timbres de voz rugiendo. Ha llegado la hora. Al 1m36s pantalla electrónica guitarrera con unos riffs liberadores hasta el 1m55s, un tercer registro a los 2m02s, recuperando lo inicial para a los 2m19s anunciarnos una velocidad que desde los 2m36s es un punk instrumental sin reemplazo. Mazazo de calidad el tema y todo el disco. Así son Kako y que sigan más y más.