Un rescate sorprendente de una grabación olvidada, perteneciente a la banda sonora de una película peruana de los años 60. Si te gusta el jazz y las cosas extrañas no deberías perdértela.
Que gozada debe ser trabajar en un sello como Vampisoul y lograr desempolvar del olvido grabaciones como ésta. Se trata de una banda sonora realizada para una película peruana del año 1966, una comedia intrascendente que curiosamente tenía a Kiko Ledgard (quien años después triunfaría en España como presentador del "1,2,3") como protagonista.
La música la compuso, y se encargó de liderar a los músicos que la grabarían, Delgado Aparicio (Lima, 1943-1983), un pianista y director de orquesta que triunfó en su país durante los años 60 y 70 dentro del jazz y al frente de la Orquesta Sinfónica Nacional.
La música de "El Embajador y Yo" se grabó a lo grande, como se hacían las cosas en otras épocas, con cincuenta músicos a las órdenes de Aparicio y con una orientación que una parte era funcional, para subrayar la película, pero por otra lúdica… En nada se parece a los "scores" actuales habituales que suman pequeñas porciones instrumentales sin estructura y que apenas tienen sentido sin las imágenes… Aquí hay temas que rebosan energía y que tienen su estructura y sus progresiones. No son demasiado largos, la mayoría rondan los dos minutos, pero admiten una escucha totalmente independiente de la película.
El aire general de todos los cortes está vinculado al jazz, pero dentro de eso hay muchísimas variedad, con piezas que se orientan hacia la música de bandas (la burlona "Marcha a Chincha"), temas vocales onda "crooner" ("La Araña", cantando Patricia Aspíllaga) y hasta un par de "surfs" ("Sexy Surf" y "El surf del embajador").
En total, "El Emabajador y Yo" es una pieza "rara" de los años 60 que cualquier amante del jazz, con querencia por el "swing" más evidente (algo que se exuda en cada tema), disfrutará con agrado.
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