Habeas Corpus: Grupo de riesgo

Habeas Corpus: Grupo de riesgo
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Habeas Corpus son, junto a Hechos Contra El Decoro, la punta de lanza del movimiento más radical de la capital del estado.

Quizá por eso estén ambos en discográficas de Euskadi. Ambos se mueven sobre una base un tanto hip hopera, aunque mientras aquellos derivan hacia el jazz y el funk, estos envuelven su música de un fuerte papel de color hardcore.

También en cuanto a letras son muy distintos, y aquí es donde, para mí, este grupo tiene su principal valor. Las letras de Habeas, sin ser inaccesibles, son bastante crípticas, pero con el resquicio suficiente para que tú busques las referencias. Lo habitual hasta ahora en este tipo de grupos era utilizar letras muy claras y directas para que todo el mundo las entienda. Esto facilita la llegada del mensaje, desde luego, pero también satura, pues lo grupos, salvo excepciones, terminan diciendo todos lo mismo y de muy parecida forma. Sin embargo, ellos han conseguido hacer referencias literarias o cinéfilas sin que el mensaje pierda, que es de lo que se trata y ahí está el mérito.

Musicalmente tampoco se quedan atrás, moviéndose entre los dos estilos ya mencionados y usando samples como complemento informativo. La inclusión de instrumentos de viento en algunos temas ha añadido una riqueza musical que su maqueta “Sociedad Mecanizada” no tenía.

Dato pendiente ( Habeas Corpus : Grupo de riesgo )Estuvimos hablando con Miguel, cantante, autor de las letras y uno de los fundadores del grupo, tras un concierto en la okupa “El Laboratorio”, en el centro de Madrid. Como se podrá advertir, tiene las ideas muy claras, con una actitud muy determinada. Pero Habeas Corpus es algo más, una actitud, por lo que Miguel al hablar de ideología o política habla en primera persona del plural.

En tus letras hay referencias, muchas veces muy concretas ¿No temes que eso haga que no llegue el mensaje? Ejemplo, en “Barrio Latino”, de la maqueta, el que no haya visto “Los amantes del Pont Neuf”, puede perderse.

M: Efectivamente, tendría que verla. Nosotros, con las letras, lo que pretendemos es crear sensaciones, no hablar de cosas abstractas. Qué ocurre, que utilizamos metáforas y un montón de referencias, y comprendo que haya gente a la que esto se le escape, pero eso debería provocar que si de verdad te interesa el tema, aprendas.

Siempre me reflejo en algo que decían los Fabulosos Cadillacs. En uno de sus temas hablaban de Víctor Jara, y ellos decían que lo importante era dar a conocer a esa persona. La gente que lo conociese diría, ¡ahí va! si aquí nombran a Víctor Jara, sin embargo, buscaban que la gente que no lo conociese dijera ¿quién es este hombre? y se pusiese a investigar.

Es decir, no consideramos que se pierda el mensaje. Nosotros hablamos de cosas muy concretas, en absoluto abstractas. Podemos variar en la forma, pero el fin es el mismo. Si hablamos de la represión policial, el hecho de usar metáforas, nombres, significados más o menos retorcidos no hacen que se pierda el mensaje.

Desde vuestra maqueta Sociedad Mecanizada, ha habido un cambio de sonido, una evolución, bastante evidente…

M: Esto es básicamente por la amalgama de grupos que nos influencian. Nos hemos dado cuenta de que no por utilizar bases hardcore o bases de punk-rock eres más reivindicativo. El mensaje puede ir oculto tras una música de baile. Además, las nuevas incorporaciones han hecho que el grupo suene diferente.

Pero ¿consideráis que este es vuestro sonido definitivo?

M: No, creo que seguiremos tratando de hacer cosas nuevas. De hecho, cada uno va conociendo mejor su instrumento y va tratando de sacar más partido. También influye el equipo, que cada vez es mejor, y las circunstancias a la hora de grabar. El sonido irá variando porque no tenemos un sonido como grupo. No somos un grupo de rock que quiera sonar a los 70, o algo así. Sonaremos según sean las circunstancias, aunque siempre hay características que se van a mantener, somos un grupo guitarrero, un grupo fuerte, pero el sonido, o por lo menos matices, puede variar.

¿Qué os llevo a fichar por Mil a Gritos?

M: Tras ser teloneros de Soziedad Alkoholika entramos en contacto con ellos. Después de un tiempo surge Mil a Gritos y nos ofrece la posibilidad de grabar un disco y nosotros lo consideramos como un valor, en principio positivo, el dar ese salto, el darnos a conocer a más gente, y el hacer nuestro mensaje, si cabe, más plural y más masivo. Incluso, si se quiere mirar así, de forma más egoísta, el crecer como grupo. No es una condición de dinero, porque realmente el salto no es cuantitativo. La gente que antes nos llamaba ahora nos pregunta cuánto cobramos, como si les fuéramos a llevar un pastón. Son las críticas que tanto Habeas Corpus como Hechos contra el Decoro hemos recibido, como si nos hubiéramos vendido. Es el discurso habitual del gueto: ¡estos se han vendido! Si nos hubiéramos vendido no estaríamos aquí hoy. Yo puedo decir misa, pero si no aparecemos por aquí, por las casas ocupadas, o aparecemos cobrando una millonada, entonces tendrían razón, pero estamos aquí por prácticamente nada, vamos a tocar para el M.R.T.A gratis, tocamos para el Molotov gratis… o sea que no tiene vuelta de hoja.

Dato pendiente ( Habeas Corpus : Grupo de riesgo )Termináis los agradecimientos del disco con la frase: “amor y guerra” ¿crees que son dos términos compatibles?

M: Sí, cien por cien. Nosotros consideramos que siempre que se ejerce la violencia, la guerra, es porque se ama algo. Son sentimientos antagónicos, sin embargo una cosa te lleva a la otra. Si algo te motiva para ejercer la violencia, o la fuerza, es porque lo amas. La violencia gratuita, nosotros, no la entendemos. Por eso decimos amor y guerra.

¿Qué opináis sobre el antimilitarismo y la no violencia?

M: Nos parecen valores lícitos, por supuesto, pero qué ocurre, que cuando no hay otra alternativa consideramos que todos los medios son válidos y necesarios. De hecho, lo decimos en una canción, la violencia como recurso, no como fin. A nadie le gusta ejercer la violencia, a nosotros no nos gusta la violencia. Sin embargo, llega un momento en que no se puede ser pacifista, tienes que tomar una determinación y nosotros no tomamos la decisión de la no violencia, pero entendemos a la gente que lo hace, y aunque no le mostramos nuestro apoyo, consideramos que es una opción lícita.

Pero la portada del disco es una señora mayor rechazando una pistola ¿o no?

M: Siempre nos hemos preguntado qué es lo que significa realmente la portada. Puede ser eso, una anciana que rechaza la pistola como diciendo: estoy harta de violencia porque ya la he visto y se que no conduce a nada, o quizá es todo lo contrario. Quizá rechaza la guerra, siempre dirigida desde arriba. Nosotros entendemos la lucha por la emancipación, tanto de clases como de los pueblos, la lucha entre estados no la entendemos.

En tus letras hay muchas referencias a libros y películas ¿cuales son tus libros y películas preferidas?

M: De libros, más que títulos, te diría autores. Para mi es fundamental leer a Eduardo Galeano, me parece que es maravilloso todo lo que escribe, a la vez que es puramente reivindicativo, con un lenguaje muy bonito, pero que habla de lo más crudo y de lo más real. También leo últimamente a Jesús Ibáñez, o a Noam Chomski, al cual le dedicamos una canción.

Por cierto, a qué te refieres exactamente cuando dices: What do you say, Noam Chomski? ¿Es una frase de afirmación de sus ideas ó le estás echando en falta algo?

Dato pendiente ( Habeas Corpus : Grupo de riesgo )M: No, quiero decir: ¿qué nos enseñas?. Le preguntamos ¿qué hacemos ante esto?.

Y cine…

M: La que has nombrado antes tú…

“Los amantes del Pont Neuf”

M: Me parece de las películas más bonitas que he visto, o “El lado oscuro del corazón”, o la otra que ha hecho el mismo director: “Despabílate Amor”. Ese cine me gusta mucho. También el cine con contenido crítico, como las películas de Ken Loach. ¡Ah!, claro, y Fernando León. Vamos a meter un tema en la banda sonora de su próxima película, Barrio.

En el fondo, no te parece como si se estuviera poniendo de moda algo en principio tan serio como es el reivindicar o incluso peor, la solidaridad.

M: Pues sí, la moda de las ONG’s o incluso la de apuntarse a nuestro movimiento, por llamarlo de alguna manera… pero ¿eso es bueno? ¿es malo?. Las modas son malas porque son pasajeras, pero si entre toda la gente que se sube al carro hay alguna que se lo cuestiona de manera permanente o por lo menos esto le ayuda a interpretar las cosas de una manera diferente, pues bienvenido sea. ¿Modas? Sí, también está la moda de lo alternativo. Nadie sabe lo que es lo alternativo, ¿es Dover? ¿somos nosotros? ¿es Ska-P? Es una etiqueta que se pone para vender. Hay gente que se apunta al mensaje reivindicativo, a Reincidentes, sin entender ni siquiera lo que dice Reincidentes.

Entrevista realizada por Félix Vera y Ioli

Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo (sección: ).

Sobre los autores del artículo:

Félix Vera
Escritor, músico y viajero infatigable, ha pasado parte de su vida en Australia y actualmente reside en Alemania. Forma parte del equipo de La Factoría del Ritmo desde el año 1995. Militó como guitarrista en los grupos de rock Containers y Ras con Ras. Ha publicado relatos en diversas revistas y es autor del poemario-rock: "Las Vueltas". Además es uno de los fundadores de la inusual editorial Alas Ediciones, dedicada a promover "literatura que deja manchas".

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