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Un álbum que sorprende por su gran contraste entre el aire festivo de su parte musical y el duro contenido de sus letras. 
Nikita es nombre artístico de un músicos y creador de origen francés, que lleva desde el año 1998 asentado en España y ha dedicado los últimos 10 años a la música, moviéndose entre sus dos países, y llegando a autoeditar dos grabaciones: "Rumbos Perdidos", en el 2002, y "Los de abajo", en el 2004.
Ahora acaba de publicar su tercer álbum, primero que el mismo cataloga como "profesional", de la mano del sello catalán K Industria.
En su música siempre se han dado cita rock, el jazz, la música latina y el reggae, y de todo ello hay algo en su reciente trabajo, aunque está marcado de forma irremisible, y de principio a fin, por la música brasileña. No en vano Nikita se desplazó hasta Bahía, en Brasil, para registrar sus nuevas canciones junto a músicos del entorno habitual de Carlinhos Brown y todas las composiciones y arreglos están principalmente orientados hacia esa onda brasileña.
A partir de ahí el álbum se despliega ante el oyente como un carrusel de color y ritmo, en el que llama poderosamente la atención las letras con intenciones claramente comprometidas de muchas de las canciones. En ellas habla de la naturaleza, del terrorismo internacional, el uso de la violencia por parte de los estados o de la reivindicación de la propia identidad sexual, sin prejuicios, sin tapujos y sin tratar de ser políticamente correcto ni nada que se le parezca. Además sus textos contrastan fuertemente con la parte instrumental, de aspecto feliz, bailable y festivo.
Un álbum con varias lecturas, con una superficie dulce pero un transfondo amargo.
Comentario:
F-MHop
(Fecha de publicación: 2008-12-16)
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