La cantante norteamericana Donna Summer, una de las másimas representantes de la música disco, falleció el pasado jueves, 17 de mayo, en su casa en Key West (Florida, Estados Unidos), tras una larga lucha contra el cancer.
Donna Summer alcanzó el estrellato en los años 70, gracias a su poderosa voz y a su alianza con el productor Giorgio Moroder, que la convirtió en la cantante más importante del momento y en punta de lanza de la música disco.
En aquella década consiguió sus mayores éxitos, con canciones como “I feel love”, “Bad girls” o “Last dance”, convirtiéndose en todo un icono para los seguidores de la música disco y un referente para la comunidad gay.
Su carrera musical se extendió hasta finales de la década del 2000, cuando el cancer la apartó de los escenarios, aunque su popularidad descendió significativamente en los años 80 y durante las dos décadas siguientes atraía fundamentalmente a los nostálgicos de la etapa disco.
En sus últimos momentos profesionales se cuenta que físicamente estaba muy deteriorada, pero que conservar plenamente sus dotes vocales.
Su legado, además de una gran influencia para otras muchas cantantes de música de baile, incluye 15 álbumes en estudio.
Interpretación en directo del tema “I feel love”:
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