Este trío mallorquín formado por Nick Markham (guitarra y voz), Sebastiá Simonet (batería y coros) y Miguel Jaume (bajo y coros), son unos entusiastas de la música rock de los años 70. Su discográfica, el sello independiente Hall Of Fame Records, les define como un grupo de folk-rock-blues-prog-art-sicodelia-seventies.
Tienen publicado dos discos. El último, “Richie III”, se salvó por los pelos de un incendio y contiene un puñado de rock vitamínico, interpretado en inglés y con un sonido clásico.
Ahora están trabajando en un nuevo disco, del que ya tienen las premezclas.
Entrevistarles no fue fácil, pues hubo que localizarlos a mitad de viaje para una actuación, asaltarlos en un bar y entre caña y caña sacarles las preguntas… Luis González, de su discográfica, nos hizo las operaciones sobre el terreno y gracias a él os presentamos las respuestas de estos tipos atiborrados de drogas, alcohol, sexo y rock’n’roll:
· ¿Cuándo se formó el grupo?
Crosstown Traffic se formó en 1961 después de la escisión del grupo “Yesflower”, del cual adquirieron la libidinosa técnica de utilizar cepillos de dientes y sartenes para simular orquestas y músicos suplentes. Luego formaron parte del grupo rockbilly “Rockin’ Caña”, famosos por no conocerlos ni Dios (y eso que lo ve todo), ni na Bet ni sa mare.
· ¿Los miembros de la banda habéis formado parte de otros proyectos musicales antes de crear Crosstown Traffic? ¿Compartís militancia en la actualidad con otras formaciones?
Sí, (adverbio), formaciones como Coa Negra (grupo de fusión mediterránea) y Tomeu Quetgles Grup (cantautor fusionado mediterráneamente).
· Reciéntemente habéis editado vuestro segundo trabajo, “Richie III”. Lo habéis grabado con Carles Seguí, a quien desgraciadamente un incendio destruyó su estudio, cuando teníais el disco muy avanzado. ¿Qué nos podéis contar de vuestro primer disco? ¿Cómo rescatásteis la grabación del segundo?
Nuestro pirmer disco “Electric Bugabanteland” (1961), Disraelí Bears (1962), “Rubber Sound” (1962/2), “Sgt. Piper Lonely Arm Club band” (1963), “Poney Road” (1964), “A Night At The Bedroom” (1965) y el disco que catapultó al trío más allá de la panaderia de la esquina “Dommy” (1966), el cual fue polémico porque Pete Towshand fue llamado a los tribunales por plagiar el 99’3 % del título, pero pagó la fianza a cambio de unas cacerolas y varios quilos de garbanzos. Luego sacaron el “Machine Bread”, “Whis You Were There” (1968-1969), que pasaron como una ventosidad por el fondo de las listas. Críticas como: ¿podrias pasarme el azúcar, por favor? (Jimi Hendrix); “con mucho ajo y poco azucar… no, ahora no puedo” (Eric Clapton); ó “¿¿??” (Charles Aznavour), obligaron al grupo a tomar la decisión de Criogenizarse (sin sal) en un lugar cuyo nombre no quiero acordarme de Alaró (Mallorca). Hasta el año 1992 cuando, a causa de una ola de calor, la nevera explotó y empezaron a tocar de nuevo. Su trabajo desde entonces: “Crosstown Traffic 2”, producido y grabado por Carles Seguí, famoso productor del grupo Fink Ployd, adquirió prestigiosidad (sin xapapote, claro). El eco producido fue una buena reverberación..ón..ón..ón..ón Y más tarde apareció “Richie III”, con su mejestuosidad baja, que fue pasto de las llamas y fue rescatado gracias al despiste de olvidar las pre-mezclas encima de la barra de un bar (La Traviesa) y caer en manos de gente honesta.
· ¿Estáis satisfecho con el sonido que tiene el disco o de no haberse producido ese accidente lo habríais retocado?
El resultado de la ejecución (sin cámara de gas) de los temas nos gustó, claro, que en las mezclas tendrían que haberse retocado… pero nuestra búsqueda hacia un sonido más antiguo hace que tropecemos con alguna estatua griega de vez en cuando..
· Vuestra música bebe cláramente del rock de los años 70. ¿Cómo os enamorásteis de la música de aquella época?
Ella. Ella llevaba un ceñido traje transparente escondiendo solo los sobacos y las sensuales curvas de su cintura venusiana. Sus labios blues y sus pechos rockeros hicieron que su mente sicodélica aumentara el soul de sus rodillas. Su mirada de complicidad hicieron que el mástil de la guitarra se enderezara bruscamente y las baquetas hicieron palpitar sus corazones. Oh… sí… mmmm… oh!
· ¿Vuestra pretensión es sonar exáctamente como si vuestra banda hubiera vivido en aquellos años o solo preténdeis que aquella época sea una fuente de inspiración?
El sonido cálido y atmosférico de las melodías de esa época hace que bañarse en las playas del Kilimanjaro nos inspire a sumergirnos hacia los profundos pozos de la inspiración. Aquí, en Mallorca, sol y buen tiempo, gracias, mucha playa y pocos lugares donde tocar.
· Los instrumento y elementos cercanos… amplificadores, compresores… que utilizáis. ¿Son de aquella época o son actuales?
Tuvimos que comprar 8 kilos de lechugas, dentríficos varios y un juego de bujías para poder adquirir el equipo: un ampli Laney de guitarra, una Yamaha y un Ashdown… contemporáneos y de transistores. Y poca cosa más de equipo, la verdad, aparte de las sartenes, litronas y patatas de siempre.
· Me imagino que un punto fuerte de vuestro grupos sean los directos… ¿Dónde habéis actuado? ¿Con qué frecuencia lo hacéis? ¿Cómo os lo montáis sobre el escenario?
Mallorca, Menorca, Ibiza, Catalunya, Euskadi, Valencia y Madriz. También tocamos en Utopía (país aquejado por falta de fe), Festival Porc, Magic Festival, Festi Festival festival, Billmore’s, y en Michigan y Ohio no hemos tocado nunca, tampoco en Tenesse ni Calatayud… en Israel tampoco. El tiempo de duración de los (templo griego) va desde los 6.735 segundos a 11.486 segundos (el récord)… del tirón con unos tres litros de cerveza por cabeza y un olor corporal al 300%. Actuamos cuando las novias nos dejan, 1 o 2 veces al mes (2 ó 3 en Canarias). Por cierto, en el escenario nos lo montamos con condón siempre, y ya se sabe, gallinas, cabras, cepillos de dientes. Y con un poderoso gancho de izquierda.
· Vuestro disco ha sido editado por una independiente, Hall Of Fame Records. ¿Qué repercusión está teniendo? ¿Estáis cumpliendo vuestras perspectivas de ventas?
Bueno, al fin! Ya era hora!. Nos encantan los solos de repercusión y en Hall Of Fame hay unos sofas muy cómodos donde puedes estar tranquilo y relajarte en medio de las giras, tomar un aperitivo y ver cómo se despachan los discos. Sí, sí, sí, claro. Dentro de poco tenemos que re-editar Richie III y un nuevo álbum a punto de ver la luz y esperemos que HOF lo vacune y lo lleve a una buena escuela, que saque buenas notas (re ó la), vaya a la Universidad, haga un master de popularidad química y pueda tener una extensa descendencia.
· Y nada más, salvo dejaros espacio para si queréis añadir algo más…
Gracias, pues sí, queremos añadir: algo más, algo más, algo más, algo más.
P.D.: Recuerdos a la abuela y que la trombosis del tio Pepe se cure pronto.
Firmado aparentemente: Crosstown Traffic
P.D.: Aunque nos metamos quilos y quilos de heroína pura… ¡no semos yonquis!
Entrevista por: F-MHop
Agradecimientos a Luis Gonzalez, de Hall of Fame Records, por su inestimable ayuda.
(Fecha de publicación: 06/05/2004)
Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 17 (sección: Entrevistas).
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