La más veterana tienda de discos de Málaga, situado en la Calle Santa Lucía nº 9, lucha para continuar abierta. Una plataforma de apoyo, Salvemos Candilejas, ha nacido para apoyar a la tienda, todo un punto de actividad cultural para la ciudad andaluza.
Tras años de acoso y derribo, incluso superando problemas graves; tales como, impagos de seguros favorables, según sentencias judiciales, derivados de inundaciones; que causaron pérdidas de más de medio millón, de las antiguas pesetas. Candilejas, sigue a pesar de todo, en la punta del iceberg y en el punto de mira, de codiciosos especuladores, con la connivencia de los que dictan y aprueban las injustas leyes restrictivas actuales, que les amparan. Estas medidas de presión, las están ejerciendo los nuevos propietarios del edificio y locales, donde está ubicada desde hace 27 años, la tienda de música más longeva malacitana. Ahora esos tiburones, al más puro estilo mafioso, apoyándose en la presión fiscal y las leyes asfixiantes promulgadas por la reaccionaria derecha neoliberal, para tratar erradicar pequeños comercios o negocios, justificando este hecho denigrante, en la nueva reforma que desprotege a los inquilinos de rentas antiguas. Y a lo largo y ancho del estado, han provocado el cierre ex profeso forzoso de cientos de miles de pequeñas empresas, entre las que se encuentran, curiosamente, miles de locales vinculados a la cultura. Porque parece ser, que la única cultura o más bien incultura,la que entienden estos políticos corruptos neoliberales que nos gobiernan miserablemente, es la de someternos a insufribles reality shows, culebrones y en suma, televisión basura en general a mansalva. Protagonizada por pseudo famosillos y personajillos varios, sin oficio y demasiado beneficio, que tan sólo, saben dar mal ejemplo, con su variado repertorio de vulgares despropósitos.
En el pasado, la tendencia en la ciudad, por desgracia, fue la desaparición sistemática de tiendas musicales, ya fueran históricas como Discos Pat, Electro Radio, Ruiz Cueto, Disco Libroo como ésta última, muy querida entre los coleccionistas de pro, como Discos Vinilo o inclusive las pocas franquicias que se aventuraron en la inhóspita ciudad costa solense, como Discos Gong o Tiendas Tipo. Ahora la tendencia, consiste en seguir imponiendo la política especulativa de la incultura, frente a pequeños comercios, que son algo más que simples negocios, como es el caso de este último bastión, que nos ocupa. Pues, Candilejas, es todo un referente e icono, en la cultura popular malagueña. Siempre obcecados y dispuestos, desde hace décadas, en apoyar a jóvenes valores de distintas disciplinas, no sólo musicales, sino muchas veces, extensibles a otras ramas del arte, la literatura y la cultura en general.
El caso es, que músicos emblemáticos de la ciudad, siguiendo la iniciativa de Adolfo “Caimán”, con la plataforma espontánea “Salvemos Candilejas” han propagado el mensaje solidario de resistencia por las redes sociales, y la verdad que ha tenido tantísima buena acogida, que hasta medios generalistas y a nivel estatal, como los informativos Cuatro TV o Tele 5, se acercaron a la tienda en una segunda quedada, el pasado 14 de marzo, para registrar con sus cámaras y micrófonos: entrevistas y músicas improvisadas por el propio Adolfo, impulsor de esta idea o miembros de la banda de rhythm& blues, Mama Kin. La primera de estas convocatorias, tuvo lugar, justo una semana antes, el sábado anterior, el 7 de marzo. Y tras las miles de respuestas positivas, tanto a nivel de redes sociales, como presenciales y el incremento de ventas en la tienda, gracias a las pequeñas aportaciones y granitos de arena, que todos los clientes, músicos y melómanos en general de Málaga, ha recopilado, creando esta gran avalancha de solidaridad y generosidad ilimitada, hacia esta gran familia formada en la actualidad por José Antonio Castañeda, Alexy el emblemático DJ Kultür, que no caben en su asombro. Pero, tampoco es de extrañar, porque siempre han tratado de estar en la vanguardia cultural, apostando por géneros y estilos, sin menospreciar a nadie y sobre todo sembrando toda la buena onda y energía que ahora, están recogiendo a modo de cosecha cultural. Una cosecha, que esperemos, que con todos estos acontecimientos, reviertan los efectos negativos que pretenden transmitirles y ocasionarles, un daño, que sería extensible a tantísimos colectivos, artistas y demás amigos de la música, que perderían este lugar de encuentro. Este escaparate, que ha servido para potenciar y valorar la música “boquerona” de todos los tiempos e incluso la estatal e internacional. En esta isla atípica y en cierto modo, utópica, pues ellos, no se limitan a moverse por cifras, ni intereses económicos, se rigen por valores algo inusuales en estos tiempos tan materialistas que corren, llamados dignidad, tesón o ingenio, para seguir apostando por la cultura, por la música, porque aunque la función económica dicte lo contrario, la artística en este caso es la que prevalece, por eso, una y mil veces ¡Larga vida a Candilejas!
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Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 25 (sección: Reportajes).
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