Sudoroso y emotivo concierto ofrecido por los argentinos Bersuit en la taberna del Bolillón. A mi llegada, sorprendido por el numeroso publico- quizás la entrada era excesivamente cara-, pude ver la actuación del grupo burgalés que hicieron de teloneros. Los burgaleses estilaban un rock muy cercano a Heroes del Silencio en algunos momentos, al Hard Rock español en otros, etc….Su cantante intento meter al publico en el concierto, aunque este estaba mas por reclamar la presencia de Bersuit sobre el escenario que por disfrutar de los teloneros. Además, me parecieron que estaban un poco verdes, a pesar de que –según anunciaron- iban a publicar su tercer disco.
Tras su actuación y un periodo no muy largo subieron al escenario, en medio de aclamaciones de la numerosa parroquia argentina allí presente- ¿Alguien sabe cuantos argentinos viven en Santander?- los Bersuit Vergarabat.
Desde los primeros compases se pudo comprobar que este iba a ser un concierto muy especial por varios motivos. Primero, porque el público que llenaba la sala, argentino en su mayoría, estaba entregado entonando cánticos, botando, cantando y bailando con cada canción haciendo que el Bolillón se transformase en una pequeña “bombonera” argentina. Segundo, porque parecía difícil creer que un grupo como Bersuit, con mas de 10 años de carrera, de tremendo éxito en Argentina y que acababa de actuar en Barcelona ante mas de 2000 personas, recalase en una sala tan pequeña en Santander. Incluso ellos mismos comentaron que hacia mucho que no tocaban en un bar de estas dimensiones, tan cercanos al público. Y tercero, porque tenían repertorio, calidad y buen hacer suficientes para hacer disfrutad y mover el pie-o incluso el culo- a cualquiera que se digne en tener un poco de buen gusto musical.
Y así, en medio de la “efusividad” -en el significado mas argentino de la palabra- de la hinchada, se fueron desgranando perlas por parte del combo del “Pelao” Cordera y sus muchachos con temas como “Convalecencia en Valencia”, “Coger no es amor”, “Cachaca”, “Yo tomo” o “A los tambores”. El ambiente de fiesta era total, y la habilidad de Bersuit para mezclar el rock con la pachanga-en el mejor de los sentidos-, con la milonga y hasta con el tango era todo un gustazo. Incluso el “Pelao” Cordera se atrevió a sacar a bailar a varias chicas al escenario al ritmo de “Petisitas Culonas”. Curioso personaje el líder de esta banda, que nos obsequio con un par de alegatos irónicos e incisivos en los que los políticos, las grandes multinacionales y en general la hipocresía reinante en este mundo, fueron los principales perjudicados. Que se jodan. El concierto era nuestra pequeña revancha y se lo hacíamos saber.
Sin darnos cuenta, el concierto enfilaba los bises finales. Aquí la banda argentina echó los restos y con su repertorio mas cañero, convirtió El Bolillón en una marabunta de piernas y brazos q saltaban y se agitaban. Temas como el mega-hit Sr. Cobranza- canción que puede llegar a recordar en su parte final a Rage against the machine-, “La bolsa”, o “La argentinidad al palo”-tema que da nombre a su ultimo disco- fueron el colofón brillante, tras mas de hora y tres cuartos de concierto, de una banda con mucha fuerza y carisma encima del escenario. Muchos argentinos en ese concierto se sintieron por un tiempo mas cerca de casa que nunca, e incluso alguno lloró de emoción. Por algo será.
Entrevista por: Pier Vinyl.
Fotos por: Oskar ( www.nochederock.com ).
(Fecha de publicación: 17/06/2004)
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