Una cita para los amigos del punk y del metal, que disfrutaron de una jornada llena de buenas vibraciones y energía sónica.
Nos desplazamos en una tarde apacible al recinto deportivo junto al parque de la Escalerilla, en la localidad axárquica de Algarrobo pueblo. Para presenciar el primer festival Axarock, con tan sólo el precedente de los Algarroba Rock e Iznate Rock del año pasado también reseñados en esta casa. Pero que por impedimentos de los “bienpensantes” politiquillos de marras de los ayuntamientos respectivos, dieron al traste la organización conjunta que tan buen resultado obtuvo el año anterior y por poco no terminan estropeando el de este, por el tema de ubicación. Por lo visto a los extranjeros residentes en la zona, no les gusta demasiado tantos chicos y chicas de negro, deben tener un problema en la vista y claro los políticos en vez de tomar posturas razonables, siempre se terminan decantando por lo más fácil: enviar a los “chicos del rock” al arroyo (nunca mejor dicho) porque a un río nos querían mandar este año. Así tal cual, pero finalmente; se impuso la cordura y al menos el Ayuntamiento no tuvo más remedio que situar el evento en un lugar céntrico de la localidad costasoleña, ante tanto agravio seguido.
Este año las bandas eran mucho más variadas, que en los recitales organizados por Axarock anteriormente. Habían buenas bandas rock & roll y punk, como Asedio o Me Voy Ke Me Estoy Cagando, que por cierto tocaran dentro de pocas fechas con la banda de Evaristo, Gatillazo, y Residuo Akustico en un concierto gratuito con motivo de la feria de Torrox, el 1 de noviembre. También hubo bandas de heavy con diversos estilos, desde tendencias clásicas, pasando por el rock más progresivo y hasta llegar al otro extremo, nunca mejor dicho, es decir bandas de metal extremo. Con la única ausencia de los thrashers con tintes death, Devastated.
Aquitipartis abrieron de la mejor forma que nadie pueda imaginar, pues aunque con escaso público y a horas tan tempranas, como las 18:30 aproximadas, supieron animar la fiesta a ritmos setenteros, con buenísimos “covers”, un sonido claro y contundente en líneas generales, tónica luego extendida al resto de bandas durante la jornada. Sonaron canciones esenciales de bandas como AC/DC, Led Zeppelin, Guns n’Roses, The Who o Lenny Kravitz . La siguiente banda entre tapa y cerveza, fueron Asedio, el proyecto paralelo del bajista y cantante David, de Me Voy Ke Me Estoy Cagando, con una base muy rápida y muy presente en todas las composiciones de esta joven, pero muy prometedora banda, con influencias de rockeras por los cuatro costados, que le da un puntillo “urbano” bastante creíble y añejo. En una línea similar, apuntando hacia sonidos más salvajes y sobre todo actitud punk con versiones de Reincidentes o La Polla, salieron los chicos de Me Voy Ke Me Estoy Cagando, que terminaron de espabilar a más de uno, a base de ritmos fuertes y letras comprometidas, especialmente la de “Tejero fue un payaso”, dedicada a cierto vecino de Torre del Mar, ver para creer. Exhumed Day practicaron un crossover entre el Black y el Death Metal, muy técnicos, guitarras afiladas y base rítmica pesada, arropaban al vocalista Rex Mortis en unas interpretaciones magistrales, que atrajeron a gran número de seguidores de ritmos más extremos. Sin duda, durante la actuación de esta gran banda malagueña, la basca presente en el concierto vibró de forma más enérgica.
Snagora venidos desde El Palo, pusieron el punto más heavy-metalero, especialmente con fuertes influencias clásicas, sin olvidar ese puntito progresivo que tan buena envoltura y resultado suelen proporcionar a los temas de este género. Como anécdota tocaron la versión de Judas adaptada al castellano de “Hell bent for leather” como una auténtica “máquina de matar”. Nazion Zero repartió estopa para los principísimos de Asturias: “Jodiendo con la Leti”, una simpática y muy irreverente versión de R.A.T.M. La canción “Papeles pa ké” también sintonizó con el público, que no paro de brincar y corear sus pegadizos temas. Incluso, dedicaron algún verso a políticos del corte de Aznar y Bush. Y unas estupendas versiones de la saga Sepultura, que hicieron tambalear al pueblo de Algarrobo, ante el contundente metal de esta histriónica y buenísima banda hispano-argentina de metal con múltiples influencias.
Aplysia siempre investigando y ofreciéndonos lecturas diferentes en todos los campos del rock habido y por haber, pero que imprimen una personalidad que sólo los grandes saben conseguir y ellos conforme transcurre el tiempo mejoran como el buen vino y no paran de crecer como músicos. Fueron los encargados de cerrar maginíficamente el festi, que esperermos que después de la afluencia moderada pero aceptable, para los tiempos que corren, siga teniendo la continuidad que se merece, a pesar de que no sea del todo políticamente correcto, ¿estamos en democracia no? Igual que supuestos conversos “demócratas” se pasean como si nada por nuestra bella tierra, después de poner a poner a parir a políticos de izquierdas y apoyar iniciativas fascistas, que a su vez son arropadas en partidos de extrema derecha que todos conocemos. La gente del rock, que por cierto, también es muy diversa y a veces, dispersa, tendrá que tener su ratito de expansión y “gloria”.
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