Pla (Gerona, 1966) parece un colgado.
Su lenguaje es sencillo y las letras de sus canciones hablan de cosas normales, o casi, porque lleva lo vulgar al extremo. Situa a un republicano anónimo abdicando de sus principios por el amor a una princesa, a un enamorado debatiéndose entre perder a su novia o denunciarla por terrorismo o a un catalán de pura cepa siendo torero y muriendo de una cogida.
Pla, con su voz casi infantil, sus letras sorprendentes y su música sencilla, editó su primer disco en el 89. “Ho sento molt” (PDI, 89) habla de sexo, muerte, amor… los temas que abundan en sus composiciones y contiene canciones tan interesantes como “Vida d’un gar”, “La sequia” o “L’ home que ens roba les nóvies”.
Su siguiente disco, “Aqui s’acaba el que es donava” (PDI, 90), baja el nivel creativo aunque contiene piezas muy aprovechables, como “Sexy” o “Historias del 600”.
En el 92 abandona el catalán, se sumerge en la rumba, sale de ella y con el cuerpo empapado en palmas y ritmo entrega su obra cumbre: “No sólo de rumba vive el hombre” (BMG Ariola, 92); donde nos presenta su ego tierno y amargo, corrosivo y siempre sorprendente. Con canciones tan increibles como “Joaquin el Necio”, donde cuenta la historia de un “machito” que ve como su mujer se va con un negro (descubriendo ironicamente el racismo subyacente en muchas personas), “Carta al rey Melchor”, una canción donde deja claro que el amor lo puede todo, o “La dama de la guadaña”, donde la muerte baila con Pla a ritmo de rumba catalana.
La critica acogió con agrado la propuesta del artista catalán y quién escuchó su disco pudo quedar alucinado con tanta imaginación al servicio de la música, pero el gran público no se enteró.
Desde entonces Pla continuó con su vida y para el 95 nos preparó “Veintegenarios”, un disco que no vió la luz por lo corto de miras de su discográfica: Contenía una canción, “La dejo o no la dejo”, en que un joven enamorado se debate entre denunciar a su novia terrorista, y perderla, o permitirle que siga con su truculenta vida. Los abogados de BMG Ariola temieron problemas legales por supuesta “apología de la violencia” y esto, unido a que la compañía consideraba flojo el resto de canciones, condenó al disco a no salir a la luz.
Pero Pla se empeñó en editar un álbum en ese año y reaparece con “Pla supone Fonollosa” (BMG Ariola, 95), con letras del poeta Catalán Josep Maria de Fonollosa. Autor éste que le descubrió Javier Krahe, otra personalidad sorprendente, irónica, y tan peculiar como ignorada por la mayoría.
El disco además incluye un tema propio, “Añoro”, y otro repescado de “Veintegenarios”: “El lado más salvaje de la vida”, una versión rumbera del “Walk on the wild side” de Lou Red.
En la actualidad Pla está preparando un espectaculo basado en “Veintegenarios”, con el fin de que las canciones de este disco se den a conocer (por otra parte se escuchan rumores de que la discográfica está planeando editar por fin el disco) y trabajando como actor en la obra “Cara de cuero” (dirigida por Pepe Miravete). Además ha colaborado junto a Extremoduro en el disco de la banda sonora de “El día de la bestia” (dirigida por Alex de la Iglesia).
Comentario: F-MHop
