Vantroi: Organizando la resistencia

Llevan años sobre las tablas y no han dejado nunca de decir las cosas como las sienten. Los mexicanos Vantroi, de gira por nuestro país, hicieron parada en Villanueva la Vera para, en el marco de la primera edición del Sôberfest, poner (una vez más) de manifiesto, la enorme sintonía existente entre este grupo y el público español.

¿Cómo está Vantroi? ¿Tenemos Vantroi para rato?

Estamos en la península presentando nuestro octavo trabajo “Aquí es donde los vamos a detener”, que ha sido producido por Fernando Madina, de Reincidentes. Hacía cuatro años ya que no nos dejábamos caer por estas tierras, a la cual hemos acudido en diversas ocasiones. Estamos muy contentos y creemos que hay Vantroi para rato. Son ya 22 los años que va a cumplir el grupo en el próximo mes de Octubre y sin duda que algún año esto se acabará, pero seguro que hoy no será (risas).

Centrándonos ya en los más de 20 años que lleváis al pie del cañón y echando la vista atrás, ¿Qué os queda por hacer que no hayáis hecho?

Queda mucho por hacer, no solo una o dos cosas. Hay muchos lugares aun por visitar. Por ejemplo, estamos promocionando el documental de la banda “Virus a la mexicana”, dirigido por Herón Zaragoza, y presentado en el “VII Encuentro Latinoamericano de Cine y Video documental “. En este trabajo están plasmados algunos de los momentos más importantes dentro de los primeros quince años de la banda. Por hacer, pues trabajar y seguir tocando, que es lo que nos gusta.

¿Con quién os hubiera gustado compartir escenario y no lo habéis hecho?

Con Julio Iglesias…(risas). Hemos tocado con grupos con los que jamás hubieses esperado tocar: Negu Gorriak, Reincidentes, Rage Against The Machine, Boikot, Ska-p,… Qué más podemos pedir.

Si tuvierais la oportunidad de empezar de nuevo, ¿qué cambiaríais y en que os reafirmaríais?

Nada en especial. No nos arrepentimos de nada. Las cagadas ahí están y las sigues repitiendo, es naturaleza humana.

Llama la atención que, tras ese periplo de más de 20 años a las espaldas, la formación del grupo haya cambiado bastante de miembros, algo que no es muy corriente en el mundo del rock. ¿Por qué?

El partir el grupo en dos continentes condiciona la composición del mismo. Bien sean las circunstancias económicas o las familiares, son algunas de las causas que están detrás de estos continuos cambios. Unos se quieren quedar aquí, otros regresan enseguida, otros salen mal parados del grupo. En fin, es muy difícil mantener una formación estable bajo estas premisas.

Vuestra música siempre ha tenido trazas de Punk y de Rock y tiene aroma a grupos españoles como Reincidentes, Boikot o incluso Porretas. ¿Os sentís identificados con estos grupos?

Han sido nuestros maestros, nuestros amigos. Nos han echado una mano muchas veces.

Volvéis a España, un país al cual sois asiduos a tocar. ¿Qué os gusta del público hispano?

Sin duda, recorrer 12.000 kilómetros y que, a llegar a este país, la gente se sepa tus canciones. Eso es lo más gratificante y nos da la vida.

¿Es difícil para un grupo extranjero (y más suramericano) hacerse un hueco en el panorama español y europeo?

Es dificilísimo. La primera vez que pisamos este país fue en el año 94 y llegamos guitarra al hombro y con lo puesto. Nos ayudaron mucho gente de Reincidentes y tocamos con grupos como Sociedad Alkohólica o Extremoduro. Coincidió aquello con el auge del movimiento zapatista de Chiapas y había mucho interés en el tema. Nos invitaban a dar charlas y entrevistas y todo aquello nos motivó para seguir adelante.

¿Cuál es el panorama actual del rock en hispano América?

Allá en México hay mucho mercado, pero lo acaparan las grandes empresas, las que llevan los festivales más grandes. Es difícil, nos abrimos puertas unos grupos a otros, pero la cosa está complicada. La gente no quiere pagar plata por vernos pero son capaces dejarse medio sueldo por ver algún grupo extranjero.

Vuestras canciones suelen hablar de problemáticas sociales y son continuas denuncias sobre injusticias, expolios… ¿Ha perdido el rock actual esa esencia de protesta? ¿ha dejado de ser el vehículo para transmitir todos esos abusos?

La música, al igual que otras expresiones artísticas, es un varazo que unos agarran como bandera, otros como realidad y nosotros como la vida misma. Si te quedas callado, es que te conformas con toda la mierda que te dan (en nuestro país tenemos narcofosas, narcopolíticos, narcobanqueros). En nuestro caso no nos queremos quedar callados y en cuanto aparece un tema de estos, allá va directo a la letra de una canción.

Si nos fijamos en la situación actual de la sociedad actual, a la que tanto hacéis referencia en vuestras canciones. ¿Qué opináis? ¿Está cambiando algo? ¿Todo sigue igual? Ahí tenemos lo de Gaza, Ucrania, el ébola en Africa, etc.

Esto va a peor. En México hay reformas políticas, aquí en España igual y no creo que la cosa mejore en las próximas fechas.

Muchos grupos comentan que, tanto que es difícil vender discos a día de hoy, hay que ganarse el pan en los directos, ¿compartís esa opinión?

Esto depende de cada grupo y de las facilidades que tenga cada banda. Unos graban los discos en su casa, hay gente que echa mano del crownfunding y otros tienen dinero para poder sacarlo sin problemas y pueden vivir de las ventas de sus discos. En nuestro caso vamos más por la autogestión, con lo cual el camino es duro. Pero tiene la parte de buena de que es más accesible pues hay veces que si te lo lleva alguien, tú mismo tienes problemas para acceder a tu propio disco. Pero está claro que a todos nos gusta tocar en directo, defenderlo sobre el escenario y que luego la gente, si le ha gustado, se lo compre, lo descargue, etc.

Una última opinión o algo más que añadir…

Pues nada, un saludo para todos los lectores del fanzine.

La Factoría del Ritmo quiere dar las gracias al grupo y a la gente de Asalto Sonoro por las facilidades dadas para poder llevar a cabo esta entrevista.

La Factoría del Ritmo quiere dar las gracias al grupo y a la gente de Asalto Sonoro por las facilidades dadas para poder llevar a cabo esta entrevista.

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