Corcobado es un tipo peculiar, con una personalidad arrebatadora que le ha llevado desde tirarse por la ventana, a formar grupos de nombre poéticos como “Demonios tus ojos” o “Mar otra vez”.
En la actualidad funciona con dos grupos, uno en el que se despacha con unos muy personales boleros, “Corcobado y Cría Cuervos”, y otro en el que su poesía atormentada y sus frustraciones íntimas ven la luz de una forma más cercana al rock.
En su nuevo disco, “Arco iris de lágrimas”, sus creaciones se distribuyen por múltiples estilos, desde el techno de “Déjame ver tu lado débil”, a una vertiente mucho más rockera en “Llanto peligroso”. También hay lugar para ritmos tribales en “Muere Mata”, para arreglos de cuerda en “Carta al cielo”, una canción con un muy buen estribillo, y para sonidos hipnóticos en “Violador”.
La voz de Corcobado, en ningún modo virtuosa, logra expresarse admirablemente, mostrándose por momentos suave, en las canciones lentas, en otros encendida, en las mas “marchosas” y en otras los juegos de voces distorsionadas se usan con maestría para expresar frustración o rabia.
“Catorce”, “Déjame ver tu lado débil”, “Llanto peligroso”, “Sangre de Arco Iris” o “Yo seré tu cáncer” son magníficas canciones que podríamos destacar, cuestión de gustos, sobre el resto, pero en general se trata de un muy buen disco que nos muestra a Corcobado como una de las personalidades más interesantes e impactantes de la escena actual en España. Aunque luego la masa alucine con los desvaríos “geniales” del sobrevalorado Nacho Cano, por ejemplo.
Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 2 (sección: Comentarios de discos).
Be the first to comment