Segundo álbum de un grupo sorprendente, que aborda la música pop, y rock, con un uso intensivo del sampler.
Después de tres años de la publicación de ‘Boogie beach days’, su sorprendente primer trabajo, aparece ‘M oo D’, el nuevo disco de Elastic Band. La espera ha sido larga y la sorpresa mayor. Los primeros compases de ‘Giving advice’ provocan desconcierto. ¿Son Elastic Band? Miras la carátula no ayuda a salir de dudas, el nombre del grupo no aparece por ningún sitio. ¿Modestia o camuflaje? Son ellos, aunque está claro que algo ha cambiado en estos tres años.
‘M oo D’, como ya nos anticipa la preciosa portada de Bjorn Copeland, tiene vocación de celebración. La historia de la música pop-rock se une para hacer una fiesta. Décadas de música se miran y piensan al unísono: ‘Let’s dance!’. Es un disco del tiempo que nos ha tocado vivir. Ejemplifica la cultura del DIY (‘Do it yourself’), pero también de la generación del ipod y la selección aleatoria de canciones. Destaca la producción, la búsqueda de sonidos y matices, los cambios de ritmo, las melodías… Y sin dejar de reírse de si mismos, como en el repaso que hacen de todos los estilos en ‘The way she move me’, desde el reggae, al hip-hop, pasando por el conutry o la balada más melódica, teniendo a un matasuegras como maestro de ceremonias.
Elastic Band dejan atrás los sonidos particulares de su anterior trabajo y afrontan este ‘M oo D’ en búsqueda de la totalidad, de cualquier estilo, cualquier grupo, el que se te ocurra: Todos están en ‘M oo D’.