No Future: Guilty?

¡Lo que son las cosas! No Future llevan casi cuatro años funcionando y su principal problema es que no encuentran un vocalista que se adapte como ellos quieren a un estilo del que la mayoría de los mortales de este planeta piensan que consiste en rebuznar y aporrear guitarras. ¡Pues no señor!. El trash requiere una voz muy específica, capaz de explotar toda la rabia por las frecuencias más graves de la garganta, en contraposición con los agudos de los grupos de metal alemán o de las cantantes de ópera.

De todas formas, la voz de Álvaro tampoco suena mal. Por lo tanto, la búsqueda de un vocal más poderoso parece hablar de la ambición de este grupo madrileño por destacar en la escena más dura, cosa muy loable.

Guilty?, su primera maqueta, presenta guitarras poderosas, batería contundente, un bajo cargante y algo que es importante en este tipo de música, una variedad de riffs, y lo que es también destacable, de ritmos, que hacen que una canción de cinco minutos no se haga pesada. Su sonido discurre por los patrones clásicos del trash más ochentero, sonido poderoso, medios ritmos y mucho palm-mute (apagar el sonido de las cuerdas con la palma de la mano). Se nota que las canciones están muy trabajadas, y eso siempre es de agradecer.

Como pegas, los coros adolecen de cierta falta de fuerza y yo diría que se han centrado más en el aspecto musical, como ya he comentado, muy bien conseguido, que en las melodías vocales, más descuidadas. Otro fallo es que con el CD (con un sonido bastante aceptable, por cierto) no acompañan las letras, con lo cual es imposible saber de qué hablan.

En resumen, un prometedora banda del sector más duro del metal. Trabajadores y exigentes, eso es media receta para seguir adelante en este complicado mundillo con buen pie. La otra media…. ¡ay, si yo la supiera!

No Future, componentes:

Álvaro Echeverría (voz y guitarra), Ignacio García (guitarra), Darío Fernández Arévalo (bajo) y Antonio Fernández (bateria)

Dirección de contacto:

nofuture@lettera.skios.es

ffernandez@nexo.es

Comentario por Félix Vera