César Muela en un periodista especializado en música y tecnología, que lleva en activo tres lustros y que ha escrito para diversos medios, entre los que se encuentran Xataka y Rafabasa.
También es músico y productor, llegando a formar parte del elenco como cantante de una de las adaptaciones de Jesucristo Superstar.
Recientemente ha publicado un libro dedicado a Black Sabbath dentro de la colección “Mitos del Rock & Roll”, de la editorial Red Book Ediciones.
En este libro hace un amplio repaso por toda la trayectoria de este legendario grupo inglés, con abundante información y numerosas anécdotas, que harán las delicias de todos los seguidores de la banda y de los aficionados al heavy metal en general.
Black Sabbath, junto a Led Zeppelin y Deep Purple, pusieron los cimientos musicales para el nacimiento del heavy metal, si bien fue esta primera banda quien aportó la imaginería terrorífica, que se convirtió en una seña de identidad clave.
¿Desde cuándo te dedicas al periodismo musical?
Doce años, aunque nunca me he dedicado solo al periodismo musical. Siempre lo he compaginado con periodismo especializado en tecnología, Internet y cultura.
¿En qué medios has trabajado hasta el momento?
Desde que hice mis prácticas de la universidad en Cadena SER, me centré en medios digitales. Empecé en Cuchara Sónica, que luego se integró en Hipertextual, y luego di el salto a Xataka, que es el medio especializado en tecnología más leído en español (con casi 30 millones de usuarios únicos al mes en todo el mundo). También he hecho diferentes colaboraciones en todos estos años, aunque la más duradera es con RafaBasa.com, donde llevo participando desde 2014. Además, en 2013 creé mi propio blog de música, Más Decibelios.
¿Cómo surgió la oportunidad de escribir el libro dedicado a Black Sabbath?
Me contactó la editorial, RedBook Ediciones. Vieron varios artículos dedicados a Black Sabbath y a la música en general en mi blog, Más Decibelios, y me propusieron escribirlo.
¿Eres fan de toda la vida de Black Sabbath o te has empapado de su música para escribir el libro?
Nunca he sido fan de Black Sabbath. De hecho, igual me mata la gente al leer esto, pero en términos generales me gustan más Deep Purple o Led Zeppelin. Soy periodista profesional y me saltan todas las alarmas cuando leo algo escrito por un fan, sea de la temática que sea. Como seguidor del rock y del heavy metal por supuesto que estaba familiarizado con Black Sabbath, algunas de sus anécdotas y su música, pero para este libro he tenido que hacer un gran trabajo de documentación. Es lo que más tiempo lleva cuando cuentas una historia real, y más en un grupo con una trayectoria de 50 años.
En el libro describes y valoras bastante en detalle sus discos. ¿Esas valoraciones debemos entenderlas como tus opiniones personales o como un compendio de las opiniones que han predominado entre los especialistas en Black Sabbath a lo largo de los años?
He intentado diferenciar mis análisis personales de los consensos de la prensa especializada sobre la música de Black Sabbath. Cuando describo las canciones, por ejemplo, eso es de mi cosecha. Cuando digo que tal disco es de los más o menos queridos en su discografía, es más un resumen del pulso de los medios especializados, que suelen coincidir bastante en sus diagnósticos.
En la web oficial de Black Sabbath, en el apartado de discografía, solo recogen los álbumes que han tenido como voz a Ozzy Osbourne… ¿Sabes si esto se debe a que está bajo el control de Sharon Osburne?
No lo sé, pero intuyo que tendrá que ver con que en la web quieren recoger solo lo hecho por la formación original, que para mucha gente son los “verdaderos” Black Sabbath.
A ti personalmente… ¿Las grabaciones con Ronni James Dio y Tony Martin te parecen auténticos discos de Black Sabbath o crees que sería más apropiado entenderlos como otros proyectos diferentes?
Me parece una falta de respeto no considerar el trabajo de Ronnie James Dio o Tony Martin como parte del legado de Black Sabbath. Otra cosa es que como seguidor te gusten más o menos, pero son discos de Black Sabbath, al igual que los trabajos de Tim Ripper Owens con Judas Priest o los de David Coverdale con Deep Purple. Caso aparte sí me parece Seventh Star, que canta Glenn Hughes y que estaba compuesto como disco en solitario de Tony Iommi. Lo que pasó fue que la discográfica forzó al guitarrista a sacarlo como Black Sabbath. Diría que este es el único trabajo en el que más comillas se pueden poner a que sea un álbum de Black Sabbath.
He disfrutado mucho leyendo tu libro y he aprendido muchísimo sobre Black Sabbath. Contiene mucha información, pero tiene una extensión comedida… ¿La extensión fue decisión tuya o un parámetro dado por la editorial? ¿Fue complicado ajustarse a esa extensión?
¡Muchas gracias! Me alegro de que lo hayas disfrutado y, sobre todo, que se te haya hecho corto. La editorial me dio libertad total. Sí pactamos una extensión mínima, pero cuando estaba escribiendo ya vi que me iba a pasar y les pregunté si me podía exceder. No me pusieron ninguna pega y me dejaron trabajar muy a gusto.
¿Podría haber sido más largo? Desde luego. Pero como periodista yo intento seguir un principio: escribir lo necesario para que un texto sea interesante, sea más largo o más corto. En el momento en el que ya has contado lo que tiene interés, no merece la pena extenderse más, porque eso es estirar el chicle y a mí parece que eso sería engañar al lector, hacerle perder el tiempo. Lo que hay en el libro es lo que a mí me parece interesante de Black Sabbath.
Me ha llamado mucho la atención que hayas usado la palabra CD para referirse a sus discos, en lugar del genérico “álbum”, o bien las palabras vinilo o CD solo para cuando las ediciones originalmente se lanzaron en uno u otro formato… Tal vez los lectores jóvenes puedan caer en el error de pensar que sus discos de los años 70 y primeros 80 se editaron en CD, un formato que empezó a extenderse a finales de los 80… ¿En qué formato has disfrutado tú de su música?
Viví la época dorada de los CD’s y tengo la manía de utilizar CD como sinónimo de disco o álbum. Es cierto que los discos de los años 70 no pudieron salir originalmente en CD porque es un formato que no existía entonces, aunque luego con el tiempo se hayan ido reeditando algunos.
Yo he disfrutado de la música de Black Sabbath en CD y, sobre todo, en streaming de alta calidad, que es como consumo música en la actualidad.
Estos días que he buscado, por curiosidad, el estado actual de las reediciones de los discos de Black Sabbath y he visto que no son especialmente fáciles de conseguir sus discos… no todos discos están disponibles en CD… parte lo están en vinilo y otros en CD en ediciones lujosas, nada económicas… ¿Crees que ya no hay público suficiente para invertir en el lanzamiento de buenas y accesibles rediciones de los discos físicos de una gran banda clásica como Black Sabbath?
La discográfica BMG lleva lanzando en los últimos meses ediciones de lujo de trabajos como Vol.4 o Sabotage y van a seguir con otros, aunque está claro que el CD es un formato cada vez más minoritario y que, desde luego, no consume la gente más joven. Incluso los vinilos están viviendo un renacer en los últimos años, así que no me sorprende que las discográficas no consideren prioritario hacer reediciones en CD porque la realidad es que ya apenas se venden.
Intuyo que el público que está dispuesto a gastarse el dinero que cuestan las ediciones de lujo es seguramente el más fiel seguidor y que tiene afán coleccionista. Si las discográficas no lanzan ediciones más baratas es porque consideran que no tienen la suficiente salida en el mercado para rentabilizarlas.
¿Qué ha sido para ti lo mejor de elaborar este libro?
Me ha permitido conectar los puntos de la evolución del heavy metal como música, entender más claramente de dónde viene todo. Ha sido un descubrimiento muy bonito. También destacaría la propia historia que tiene Black Sabbath, que ha sido una gozada escribirla. Vivieron tantas cosas y tan locas, que hasta me lo han puesto fácil para contarlas.
¿Tienes proyectado algún próximo libro?
Sí, siempre he querido escribir novelas, pero no será a corto plazo. También estoy abierto a escribir más libros de música, claro, aunque no tengo nada en el horizonte ahora mismo.
¿Te gustaría añadir algo más para nuestros lectores?
Que tanto si les gusta Black Sabbath como si no, que le den una oportunidad al libro porque su propia historia es entretenida y alucinante. Solo con las anécdotas y las cosas que les pasaron creo que tienen para echar un buen rato.
¡Muchas gracias por el interés!
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Este artículo fue publicado originalmente en La Factoría del Ritmo Número 26 (sección: ).
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