Mario Cobo: La noche americana

No recuerdo qué crítico de arte insistió, allá por los 80, en renovar la idea que el personal tiene del artista. Desmarcándose del ideal romántico en el que un tipo solitario es bendecido con una milagrosa inspiración que contiene la clave para asombrar al público, este hombre ponía énfasis en lo, por otra parte, obvio: lo peculiar del artista es su capacidad para dedicar mucho, mucho tiempo a su arte y a sus obras. Donde un amateur acabaría hastiado, saciado y desorientado, el artista considera que el asunto apenas acaba de empezar. Esta definición encaja perfectamente en la figura de Mario Cobo, un guitarrista, cantante, compositor y productor que no ha parado desde que pusiera en marcha en 1.994 a los imprescindibles Nu Niles, que llegaron a grabar seis discos y a girar por Europa y Estados Unidos, hasta pasar a formar parte de la banda de Loquillo en 2.015. En esas dos décadas, se ha apuntado a multitud de bombardeos, incluyendo Los Mambo Jambo con Dani Nel.lo y las bandas de nombres como D.J. Montana (batería de Elvis), Sonny Burgess, Dale Hawkins o Kim Lenz. En su tiempo libre, incrementa su saber enciclopédico, experimenta con sonidos nuevos, compone, graba lo que compone y sale a la carretera para presentarnos, en el formato de fiesta rocanrolera, el resultado de su obsesión por esos sonidos que conoce como nadie. En esta gira de 2.018 presenta su último EP Almería gone guy (Sleazy records/ Buenritmo records) y le acompañan Alfonso Alcalá (miembro también de la banda de Loquillo) y Blas Picón, batería de los Nu Niles.

Presentas ahora en directo el tercero de una serie de EP´s. Tras reivindicar la música instrumental en los dos anteriores, en este has vuelto a grabar voces. ¿Qué ha cambiado? Y además en inglés…

Realmente no ha cambiado nada; me apetecía volver a cantar y colaborar con mi amigo Ben Rowdon en las composiciones. Voy componiendo a diario sin pensar demasiado, todo lo que se me ocurre lo guardo y cuando tengo algún proyecto en concreto me siento a escuchar todas las ideas que tengo, selecciono las que más me apetece trabajar en ese momento y por ahí tiro.

Tienes una larga e intensa trayectoria y has participado en muchos proyectos, de los que hablaremos. ¿Qué lugar ocupa este Ep entre todos ellos y en tu carrera en general?

Pues ahora mismo el que más ilusión me hace es mi nuevo trabajo y en el que intento no cometer los errores anteriores y sí otros nuevos. Pongo en práctica lo aprendido tanto a nivel de producción como de intérprete y composición esperando que la gente pueda pasar un buen rato con mi música. Eso sí, estoy deseando entrar en un estudio y grabar de nuevo.

En 2.016 publicaste una maravilla de disco: Burnin’ Daylight With Mario Cobo And His Guitar Posse (Sleazy Records). Creo que me llevará tiempo el hartarme de escucharlo. ¿Qué me dices de ese álbum?

Gracias, me alegro que te haya gustado. Es un disco que me llevó mucho tiempo acabarlo pero al final fue algo positivo porque lo pude ir completando a medida que avanzaba el progreso para darle variedad. También fue un trabajo de investigación y experimentación y me permitió mezclar temas tan distintos como “Dune Tune” y “40 Laps to Go!” sin que ninguno pareciese fuera de lugar. ¡Tengo muchas ganas de hacer otro disco así! Aunque seguro que me sale totalmente diferente. Soy muy fan de los discos de guitarristas de los 50´s y 60´s. Colecciono todos los que se cruzan en mi camino y esa era un poco la idea de Burning Daylight. Mezclando ideas de Jimmy Bryant, Les Paul, Buddy Merrill o Hop Wilson por decir algunos nombres.

Háblanos de estos conciertos que vas a ofrecer en 2.018. ¿Por qué te has animado, por qué te acompañan esos compinches y no otros y qué repertorio se encontrará el que vaya a veros?

Me he animado porque después de dos años muy intensos tocando con Loquillo me apetecía volver a salas pequeñas y tocar mis temas. La banda para este tour son, primero de todo, amigos y, segundo, unos músicos espectaculares con los que disfrutar de lo lindo. El repertorio de salida para esta gira es bastante amplio y va desde temas de Nu Niles a los dos discos nuevos de los que hablamos anteriormente. Espero que no sea demasiado loco…

¿Qué halago te gusta más que te hagan después de una actuación?

Sobre todo, que lo han disfrutado y han pasado un buen rato, que les gustan mis discos.

Pero también acudirás a conciertos. ¿Qué echas en falta en la oferta de música en directo actual (o qué crees que sobra)? Y aquí cabe todo: estilos, actitudes ante el espectáculo, ante el sonido…

Pues no lo tengo claro, faltar no falta nada porque ahora parece que hay mucho de todo, ¿no?

Ante semejante proliferación de bandas de versiones ¿no sientes la tentación de predicar el evangelio de tus temas favoritos?

Yo he tocado versiones de mis temas favoritos siempre, es una buena forma de aprender, pero siempre han ido acompañando a mis temas propios. No entiendo lo de las bandas tributo pero si es lo que la gente quiere qué voy a decir yo. Igual es que ahora la gente no hace temas tan buenos como los de esas bandas o que las nuevas canciones ya no tienen tantas posibilidades como hace unos años para convertirse en clásicos. Antes había menos canales de comunicación y la música era un negocio mucho más grande, tenía más importancia en los medios, un éxito podía hacerse popular más fácilmente.

Desde 2.015 eres guitarrista en la banda de Loquillo. Has participado en los dos últimos discos de estudio y en sus correspondientes giras. ¿Qué es lo mejor y lo peor de estar a ese nivel?

Lo mejor es todo lo que he aprendido estos dos años. Me he forzado a salir de mi círculo habitual e intentar estar a la altura en este nuevo terreno. Loquillo lleva un equipo de trabajo espectacular a todos los niveles y eso te hace estar muy a gusto y aprender cada día de todos los aspectos del mundo del espectáculo. Aparte he tenido la oportunidad de trabajar en producciones grandes, de escribir para una orquesta, etc. Cosas para las que me he preparado durante años pero que no he podido desarrollar por vivir siempre al límite en el underground. Lo peor está por llegar, supongo, porque ahora mismo no lo sé. Hay una circunstancia que ha cambiado y es que antes yo decidía cualquier aspecto de mi vida profesional y ahora tengo un compromiso con un equipo pero ahora mismo, mientras tenga mis épocas en las que pueda sacar adelante mis proyectos y combinarlos, estoy más que satisfecho.

El Loco representa en cierto modo, entre otras cosas, claro, una visión nostálgica sobre los ambientes urbanos de hace décadas, especialmente en Barcelona. A veces tiene uno la impresión de que las grandes capitales europeas se han convertido en franquicias de sí mismas, perdiendo ese aroma de los barrios. ¿Cómo ves a Barcelona en este sentido?

Pues, aunque quedan resquicios de lo que fue y es una ciudad con gente muy interesante haciendo cosas muy interesantes, pienso que para su tamaño ha perdido mucho de lo que yo vi cuando era un adolescente. Es inevitable seguramente ya que los tiempos cambian y quizá eso que añoramos no está porque simplemente ya no se puede volver a repetir en los tiempos que estamos. Ya sea por como son las relaciones sociales hoy en día o por motivos económicos. El Loco es el último de su especie, lo que su generación vivió no creo que vuelva a suceder en este país aunque de todas formas os puedo decir que lo que más me ha sorprendido de él es que siempre tiene un pie en el presente y no se deja llevar por el mundo de la nostalgia.

Espero que no te siente mal que te diga que, si por algo mereces ingresar en ese Salón de la Fama que aquí no existe, es por haber sido parte principal de esa enorme banda que fueron The Nu Niles. Tiene uno la sensación de que merecíais más gloria, aunque eso de qué cosa sea la gloria es algo muy relativo. Con el paso de los años ¿Qué sensación tienes de lo que hicisteis? ¿Os habría ido de otra manera en el caso de aparecer en la escena actual?

¿Porque me iba a sentar mal? Es un elogio, han sido muchos años luchando en la carretera por todo el mundo con Nu Niles. Yo para mi he triunfado y bastante, los años 90´s y 00´s no fueron años de Rock´and´Roll a nivel popular y pese a todo grabamos unos cuantos discos e hicimos muchas giras. Bueno, y acabamos nuestra carrera con un número 1 junto a Loquillo. Muy disparatado, ¿no? Hay muchos grupos que escucho ahora y no entiendo cómo no les va mejor y por el contrario hay tantos grupos que no entiendo ni como les han sacado un disco que están triunfando. Quizá esa es la razón de no haber tenido más éxito (desde el punto de vista comercial) con Nu Niles, jajaja…

Estuvisteis de gira por Europa y Estados Unidos. He escuchado opiniones sobre ambos públicos pero ¿qué me cuentas tú de ellos?

Son muy diferentes. Lo que aquí en Europa a nivel musical para algunos es una forma de vida y de diferenciarse del resto allí es tradición y algo normal. También allí sirve para eso a nivel estético pero, a nivel puramente musical, cualquiera tiene un abuelo que escuchaba Elvis, Hank Williams o Fats Domino de joven. Allí les llaman Oldies y aquí Rock and Roll… hablo de manera genérica pero para explicarlo un poco fácil. Lo que más me gustaba de los USA era que a la gente le encanta bailar con los grupos en directo.

Otra muesca en tu revolver es tu militancia en ese trallazo (no se los pierdan si pasan por su ciudad) que son los Mambo Jambo. ¿Cuál es tu relación con la banda ahora mismo?

No tenemos tanto contacto ya que yo me he mudado y al no vivir en Barcelona es más difícil vernos pero eso no ha cambiado nuestra relación para nada. Han sido muchos años juntos de trayectoria, alguno incluso desde mucho antes que con Mambo, y el roce hace el cariño, dicen.

Podríamos dedicar una entrevista a hablar del equipo que usas o has usado. Dejémoslo en alguna recomendación para los aficionados, en que nos comentes si aprovechas las grabaciones de estudio para experimentar y en si utilizas lo mismo con Loquillo que en esta gira.

Las grabaciones en el estudio son los mejores momentos para experimentar e ir un poco más allá porque en el momento de la gira las energías están concentradas en la interpretación y transmitir. A mí, que me gustan mucho los cacharros, me gusta llevármelo todo al estudio pero en directo intento montar un equipo que, aparte de cubrir el espectro de sonidos que necesito, sea fiable y no de problemas. Me encantan los ecos de cinta y las reverbs de válvulas y muelles pero he aprendido, después de romper unas cuantas, que a la hora de girar es mejor ir sobre seguro. Con Loquillo llevo más pedales que en toda mi vida he llevado pero, sobre todo, debido a que llevo diferentes guitarras y necesito que todo esté bien equilibrado y definido cuando cambio entre ellas. Desde hace ya bastantes años que apuesto por el producto nacional si tengo la opción así que llevo amplificadores, guitarras y pedales de marcas nacionales como George, Bull Skull, General Vintage, Raimundo o Manlay. Me encanta cuando me preguntan porque creo que hay gente muy preparada a nuestro alrededor haciendo cosas de muy buena calidad y que no tienen nada que envidiar a productos extranjeros. La comodidad de poder llamarles y modificar o hacer a tu gusto el producto final o incluso cuando se te estropea es casi inmediata la reparación y la cercanía de tener cerca a freaks de la música como tú y hacer crecer la comunidad musical a tu alrededor.

Cuéntame de tu labor como productor. ¿Te lo tomas como un trabajo puro y duro o siempre acabas disfrutando en el proceso?

Yo todo me lo tomo muy en serio pero eso no quiere decir que no me implique y disfrute. Como productor me gusta implicarme al máximo y sentirme parte de la creación puesto que estás tratando con los sueños de los músicos y muchas horas de esfuerzo componiendo y practicando. A mí me encanta el tema de la producción y es difícil no disfrutar de ello, también es verdad que normalmente trabajo con bandas que me gustan y con los que conecto.

¿Qué opinas de la producción de los discos que se hacen ahora, ese furor por el volumen?¿Y qué me dices de esta fiebre de remasterizar los discos?

En los últimos años se están empezando a hacer unas producciones menos hirientes y más centradas en las canciones y en el buen sonido. Yo es que durante muchos años casi todo lo que he escuchado se hizo mucho antes de entrar en la guerra del volumen, jejeje. El tema de las remasterizaciones es muchas veces culpa de los artistas que no acabaron contentos y quieren quitarse la espinita… yo estoy más a favor de hacer otro disco intentado no volver a cometer los mismos errores. A no ser que sea un verdadero desastre, la mayoría de veces, si son discos muy conocidos, la gente ya los ha asumido tal y como aparecieron en su momento y la nueva edición no aporta mucho más.

¿Qué sesión histórica te hubiera gustado producir?

Supongo que desde el punto de vista de productor “Good Vibrations” de los Beach Boys, cualquiera de Frank Sinatra, “For the Last Time” de Bob Wills por lo que significa esa grabación, “London Calling” de The Clash, el primer disco de “Stray Cats” que me sigue pareciendo espectacular como suena, casi cualquier sesión en el estudio de Owen Bradley aunque me encantaría que fuese “Walkin´ After Midnight” de Patsy Cline , “Heartbreak Hotel” de Elvis con Chet Atkins como productor, “Brothers” de The Black Keys con Mark Neil a la producción. La sesión de grabación de “Peggy Sue” de Buddy Holly & The Crickets en los estudios de Norman Petty, en la sesión del disco “Polynesian Suite” de Jerry Byrd que me parece maravilloso…un sinfín de discos… el primero de Gene Vincent viendo embobado tocar a Cliff Gallup, no se.. es que todo resultaron ser momentos de mucha magia en el mundo de la música y tuvo que ser maravilloso estar presente.

Por cierto: tengo entendido que anda por ahí suelto Mike Sánchez. Podría estar bien hacer algo juntos ¿no? Ahí lo dejo…

¡Claro! Mike y yo hemos tocado unas cuantas veces juntos y siempre es genial. Colaborar con un tipo como él con tanta sabiduría, carisma y amor por la música es siempre un placer. Todo se andará aunque el tiene una banda buenísima y que me gusta mucho.

Y acabemos con un clásico: una recomendación

Ahí van varias: Cepillarse los dientes después de cada comida. Comprar discos a las bandas después de los conciertos. Dejar de pensar que porque un tío nació en New Jersey es mejor que tú. No hacer caso de mis consejos. No perderse los conciertos de Mario Cobo.

Suscribo todas esas recomendaciones menos una.

Video presentación del EP de Mario Cobo “Almeria Gone Guy” (2018), “Breeze” by Mario Cobo & His Swingin’ Stringers y Nu Niles “El Crujir de tus Rodillas”:

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