Mauri Sanchis: Palpitando Al Lado De Un órgano Hammond

   Desde Valencia un joven músico autodidacta que ha decidido vincular su carrera musical al mundo del jazz y el blues.

    Su instrumento es el órgano Hammond y creó su primer grupo en el año 92, cuando nace Progressions, una banda de blues con la que comenzó su aprendizaje en compañía de otros músicos.

    Antes absorbía música en solitario, y fue preámbulo para sus viajes al continente americano. Allí se mueve por el mundillo musical de California y liga su actividad a grupos como MJC Jazz Band, Hay Wood & The blues Commandoes o la banda de Gary Hamilton.

    De vuelta a España comienza a tocar junto a numerosas formaciones y es con la del guitarrista Graham Foster con la que más a gusto se encuentra y más tiempo permanece, un año fructífero, que ayudó a que su nombre fuera cada vez más conocido y artistas como Javier Vargas, Ximo Tébar o Dr. Lonnie Smith se fijaran en él y elogiaran su forma de tocar.

    En el año 2001 se proponer abordar su primer disco en solitario, un trabajo que se ha extendido hasta el 2003, momento en que por fin se ha editado “Less is more”, de la mano Maos Records y la Factoría Autor (vinculada a la SGAE).

    Este trabajo tiene una clara orientación internacional, tanto en la imagen como en el sonido, mirando hacia el funk-jazz de corte elegante y moderno. El disco contiene ocho composiciones originales de Mauri Sanchis y una versión, “Ain’t no sunshine” (tema compuesto por B. Withers).

    Para el álbum ha contado con el apoyo de cinco músicos como banda y las colaboraciones de otros cinco en la calidad de invitados, de entre estos últimos destaca la participación del conocido Javier Vargas.

    Para llevar estos temas al directo Mauri ha creado una banda específica, donde no están todos los que participaron en el disco, pero donde sí, y muy curiosamente, militan tres músicos que hace unos diez años completaban, junto a Jose María Casañ, el grupo Seguridad Social: Jesús Gabaldón, Rafa Villalba y Arístides Abreu.

   En la actualidad Mauri Sanchis supone una de las más jóvenes y prometedoras apuestas de nuestro jazz, que además cuenta con grandes posibilidad de labrarse un nombre en el circuito internacional de ésta maravillosa música:

Aunque conozco los orígenes del jazz y por lo tanto sé que es una música de origen absolutamente popular. No sé porque a estas alturas siempre lo puse en duda al escuchar tu disco. Por ello me sorprendió muchísimo el leer que tu formación es absolutamente autodidacta, pues siempre que pienso en músicos de jazz lo asocio a personas que han estado estudiando música durante muchos años ¿cómo se originó en ti el interés por tocar música? ¿es un don mágico el que te permite sacar música de los instrumentos?

Seguramente te parecerá extraño, dados los estilos de música con los que he experimentado toda mi vida, pero yo empecé a tener interés por la música al escuchar un cassette de “Carros de Fuego” de Vangelis, que mi padre ponía en el coche una y otra vez. Casualmente, mi abuela tenía un órgano de tan sólo 2 octavas con botonera tipo acordeón que nunca se había usado y ahí empecé a probar. Cuando mis padres notaron que podía hacerlo sonar, decidieron enviarme a una academia de música. La experiencia “académica” no funcionó, pero dentro de mi nació un amor por la música que no he dejado hasta la fecha.

Y tu encuentro con el órgano Hammond; ¿cómo se produjo? ¿qué significa ese instrumento para ti?

   Mi encuentro con el sonido Hammond llega mucho más tarde, la lógica evolución musical, mi entrada en la adolescencia y la curiosidad por la música en directo, hacen que deje un poco de lado mi pasión por Vangelis y Jarre y me adentre en terrenos más rock con D.Straits e inmediatamente después más blues con Clapton, B.B.King, Santana, etc… Siendo teclista, escuchar esa música te lleva directamente a un enamoramiento total del Hammond o del piano, y yo me incliné desde el principio hacia el Hammond. Obviamente, desde el momento en que me sentí atraído por su sonido hasta que supe dónde y cómo poder comprar uno (en el extranjero) y, especialmente, hasta que un crédito me permitió comprarlo, pasaron muchos, muchos años (creo que lo compré en el 2000). Pero, una cosa es cierta, desde el momento en que le puse las manos encima, supe que tenía que intentar algo más serio de lo que estaba haciendo hasta el momento.

En el año 1992 fundas una banda de blues, Progressions, ¿qué nos puedes contar sobre ese grupo y aquellos años?

   Progressions fue una experiencia maravillosa que nos llevó a un grupo de lo más variopinto a ensayar 2 y 3 veces por semana, simplemente por el placer de tocar y pasar un rato juntos. Las actuaciones eran auténticos espectáculos en los que el público se volcaba con temas clásicos de blues y de Rock desde Freddie King hasta Deep Purple. En esa época se produjo mi primer contacto con el sonido Hammond. El grupo se mantuvo tocando 8 años con interrupciones lógicas por los estudios y trabajos de cada uno, pero nunca se apagó la llama. De hecho, la llama no se ha apagado todavía porque aún nos vemos y tocamos a veces, pero nuestra última actuación se ve tan lejos atrás que sí parece que esté extinguiéndose definitivamente.

Con esa formación viajas a América y allí tuviste experiencias musicales
muy interesantes; ¿qué nos puedes contar de todo aquello? ¿a qué músicos
conociste?

   En América estuve un semestre, concretamente en la Bahía de San Francisco. Fue una experiencia brutal de aprendizaje junto a auténticos monstruos. Tuve la suerte de tocar en hasta 5 bandas e incluso junto a Jay Wood & the blues Commandoes y Gary Hamilton…una pasada.

De vuelta a España estuviste tocando con el guitarrista Graham Foster¿qué aportó ese trabajo juntos a tu aprendizaje musical?

   Al volver a España, tras la experiencia americana, mi perspectiva con respecto a la música cambió radicalmente, ya que necesitaba algo más que la diversión que me ofrecía Progressions. De manera que decidí llamar directamente a Graham para que me hiciera una audición. En principio se negó, pues no le apetecía tener que pasar por el largo proceso de “adaptar” el sonido de un teclado a su grupo que ya estaba totalmente ensamblado pero, ante mi insistencia, me dijo: “ven a casa dentro de una hora”, me dejo tocar un sólo tema y después dijo: “tocas con nosotros este jueves (era martes)”. A partir de ahí pasó, más o menos, un año hasta que se deshizo el grupo. Fue una experiencia única, creo poder afirmar que Graham es una de las mejores guitarras de blues del mundo y un auténtico showman en el escenario, tiene una fuerza que no he visto en nadie, es impresionante.

Y desde entonces hasta la edición de “Less is more”, ¿en qué proyectos musicales has estado involucrado?

   Desde entonces intenté montar varios proyectos para llevar mi música en directo, pero no cuajó ninguno. Montar un grupo es algo muy difícil con el agravante de que yo vivo en Alcoy, donde no hay muchos músicos con los que poder tocar.

Por cierto, según la información promocional que nos ha llegado han sido muchos los músicos que han dicho elogios hacia ti y tu música ¿qué sientes cuando gente tan importante como Javier Vargas o Gary Hamilton expresan admiración hacia tu forma de interpretar?

   Obviamente, es un orgullo indescriptible. Comentarios así te dan fuerza para continuar en un mundo, el de la música, que da pocas alegrías comparadas con las dificultades con las que te tienes que encontrar.

“Less is more” es un primer disco en solitario, que ha sido publicado por la Factoría Autor, próxima a la SGAE. ¿Cómo surgió la oportunidad de grabar y editar este disco?

   Less is More partió de la idea de Ximo Tébar de poder editar mi música y, muy especialmente, de la reafirmación que obtuve de Lonnie Smith, que actuó como mi mentor en la decisión de saltar definitivamente al ruedo. Curiosamente, una vez metido en el proceso de la producción (que llevó a cabo Ximo) y también impulsado por otros productores, decidí montar mi propia productora para tener total libertad creativa e incluso poder producir y componer para otros artistas. Gracias a la estructura creada para Maos Multimedia (www.e-maos.com) hace apenas un año, creamos poco después, Maos Records, el sello independiente que ha editado el CD y por el que apostó Factoría Autor para su distribución.

De las canciones recogidas en el disco ocho son composiciones tuyas y una es una versión ¿en qué te inspiras para componer? ¿a qué etapas de tu carrera corresponden esos ocho temas?

     Todos los temas son recientes, luego corresponden a la etapa post-Graham en que me acerqué a otros estilos más fusionados dentro del jazz. La inspiración creo que llega directamente de toda la música que escuchas, de tus influencias. Aunque imperceptibles para la mayoría, en el CD hay influencias de Jarre, Sting, Música de Tv, aparte de los obvias influencias de organistas, Santana, Benson y demás…

Por cierto, aunque tu formación sea autodidacta ¿a estas alturas dominas la teoría de composición; solfeo, armonía, etc… o compones por pura intuición?

   Lamentablemente, como te he comentado antes, nunca he sido capaz de seguir ningún método.Es patético, pero es la verdad. Aunque estoy seguro de que voy a intentarlo de nuevo, es muy difícil corregir todos los defectos adquiridos a través de los años y, al mismo tiempo, resulta muy aburrido tener que empezar desde la base para poder aprender debidamente. Es por ese motivo que me resulta tan poco motivador.

Y qué nos puedes contar de la versión del tema “Ain’t no sunshine” ¿por qué la elegiste?

   La elección de poner una versión es la auténtica anécdota del CD, ya que fue un consejo de marketing que me dio el propio Dr. Lonnie Smith en su casa. Me dijo: “Mauri, pon los temas que creas convenientes, pero deja al menos uno cuyo nombre conozca todo el mundo al ver la contraportada del CD, para que la gente tenga un aliciente para comprarlo”. Elegí “Ain’t no Sunshine” porque me parece un tema precioso y que conoce mucha gente.

¿Estás llevando estos temas al directo? ¿Con qué formación?

   Sí, empezamos este mismo mes. La presentación oficial del CD se hace en el centro Panoramis en Alicante el día 6 de Junio en un acto organizado por la Agenda Cultural Alacalle y FNAC.

   Para directo, tengo la suerte de poder contar con músicos de contrastada calidad y experiencia como Jorge Lario a la guitarra, Manolo Crespo a la batería y un jovencísimo Bajista, Xavi Alamán, que seguro dará mucho que hablar.

“Less is more” es un disco que suena moderno y elegante ¿qué grupos o artistas son los que te gustan y han podido influir en lo que son esas canciones?

   Vaya Pregunta, ¡¡hay tantos!! Pero, resumiendo a los más influyentes, diría que Santana, George Benson, Booker T. y Jimmy Smith.

¡Ah!, una cosa que me ha llegado al alma; en el tema “Lonnie’s Tune” hay unos soniditos tipo scratch que deben estar sacados de algún preset de un sinte; no es que queden mal, pero con unos scratchs de verdad el arreglo habría quedado redondo ¿conoces el uso del tocadiscos como auténtico instrumento musical? ¿has barajado la posibilidad de contar con un DJ para alguna de tus futuras grabaciones?

   La verdad es que mi aportación al tema de las programaciones se limita al groove en sí mismo, a la hora de componer. Todo el trabajo de pura programación ha corrido a cargo de Santi Navalón, Jorge Pérez o el propio Ximo. A mi me parece un efecto moderno, pero he de reconocer mi total ignorancia en ese campo. Sí que se me ha pasado por la cabeza preparar alguna versión DJ, ya que tengo amistad con Karol Berkley, a quien le hicimos el diseño de su CD, First Take en nuestra productora, pero no ha llegado el caso todavía.

Tanto el título como la presentación del disco tiene un marcado tono internacional; para alguien que no te conociera le podría parecer perfectamente un disco extranjero ¿es esto algo intencionado? ¿tienes pensado penetrar en mercados extranjeros?

   Sí, es cierto. Es una simple cuestión de respeto, siempre me he nutrido de música con raíces extranjeras como el jazz o el blues, mi instrumento es puramente americano. Simplemente, por lo mismo que no me imagino un disco de flamenco con título en inglés (aunque lo haga un japonés), no me imagino el mío con título en español. A parte, desde el punto de vista comercial por el que me preguntas, es obvio que la afición por el jazz en España no es tan grande como en el resto de Europa y no hablemos de USA o Japón. Es mucho más conveniente hacerlo así, si queremos que el disco pueda tener una mínima repercusión. De hecho, están llegando peticiones del CD desde un montón de países del mundo, llegando reseñas de prensa desde USA, Canada, Argentina, Chile, Venezuela, Francia, Alemania, Inglaterra, Bélgica, Italia, Japón y hasta de Indonesia. Hasta el momento, la repercusión a nivel de prensa está siendo sorprendentemente positiva.

El jazz español en un gran desconocido para el gran público ¿nos puedes recomendar artistas y discos para que nuestros lectores lo descubran?

   Simplemente mirando los créditos de mi CD puedes encontrar algunos de los mejores artistas de jazz y blues de España, Ximo Tébar, Ricardo Belda, Pedro Ruy Blas, Graham Foster. Pero también Perico Sambeat, Jorge Pardo, Carles Benavent o mi amigo Carlo Coupe.

Y nada más; salvo dejarte espacio para si quieres añadir algo más y para que nos comentes tus proyectos de futuro.

    Si quieres puedes hacer referencia a mi página web, donde se puede escuchar el CD: www.maurisanchis.com, la cual recibió 800 visitas el més del lanzamiento del disco.

Entrevista: F-MHop.
(Fecha de la publicación: 29/05/2003)